Como consecuencia de la sequía, primero y posteriormente las excesivas lluvias, “la situación de los productores sojeros es mucho peor de lo que muchos creen”, sostuvo Carlos Iannizzotto, presidente de CONINAGRO.
“La actual cosecha de soja no sólo se redujo por efecto de la sequía en más de 20 millones de toneladas, a 36 millones de toneladas, según las últimas estimaciones, sino que también ha bajado la calidad como consecuencia de la excesiva de humedad que recientemente afectó al cultivo”, comunicó la entidad.
Además, mencionaron que “la proporción de la soja de primera en condición mala se eleva a 58% y, peor aún, para la soja de segunda más del 70% de la producción se encuentra en malas condiciones, según la Bolsa de Comercio de Buenos Aires. En lugares claves de la zona núcleo, como Venado Tuerto, la producción ha sido ‘mala¿ en el 70% para la soja de primera y 80% para la segunda”.
“El deterioro en la calidad del grano ha llevado a que los productores deban sufrir descuentos que van desde el 20 hasta el 80%, con el consiguiente quebranto económico”, advirtió el titular de CONINAGRO.
En estas condiciones, Iannizzotto adhirió a las declaraciones del ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, en cuanto a que “las retenciones a la soja son un impuesto ridículo
