Como anticipo de su habitual informe de perspectivas y evolución climática, el Instituto de Clima y Agua del INTA confirmó la alta probabilidad de lluvias durante los próximos días sobre gran parte de la zona núcleo y que, además, alcanzarían a las provincias de Santiago del Estero, Tucumán y Salta, en el noroeste del país.
Al mismo tiempo, se precisó que estos eventos tendrán una gran variabilidad en su intensidad y su localización espacial, por lo cual algunas zonas podrían recibir lluvias insuficientes para revertir una situación adversa debido a las altas temperaturas y falta de humedad registradas.
Hacia fines de esta semana, señalaron, sería posible confirmar si las próximas precipitaciones ocurrirán, como se estima hasta el momento, a fines de la tercera semana de enero. Como advertencia importante, el Instituto señaló que las áreas que no recibieran lluvias durante ese período podrían agravarse.
El INTA cuenta con los equipos técnicos, las herramientas y tecnologías (satelitales, radares, estaciones meteorologicas de superficie) a disposición para la evaluación de la situación y generar datos y mapas que reflejen objetivamente las áreas afectadas que necesiten asistencia.
A la fecha, no hay evidencias científicas, ni probabilidad significativa de que las condiciones continúen siendo extremas durante el trimestre. El escenario más probable es que gradualmente comiencen a regularizarse los eventos de lluvia (disminuyendo los días entre lluvias) a partir de fin de enero y durante febrero.
Las situaciones más deficitarias ocurren principalmente en Córdoba (salvo algunos sectores del este), el sur y este de Santiago del Estero, oeste del Chaco, sur, sudoeste y norte de Santa Fe, toda la provincia de Buenos Aires (salvo zona sudeste y sur), norte y este de La Pampa.
Gran parte de las regiones productivas vienen sufriendo situaciones déficit hídrico durante las últimas campañas (2005-2006, 2007-2008, 2008-2009, 2010-11, actual). Esto las hace muy vulnerables regionalmente ante situaciones de riesgo como la actual.
Las condiciones atmosféricas son acorde a lo esperado para un evento La Niña en el océano Pacífico ecuatorial, que ha sido pronosticado y difundido desde el invierno pasado para la campaña 2010-11.
