El Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda realizó este martes la apertura de sobres para el cuarto tramo de las obras de ampliación de la capacidad del río Salado en la provincia de Buenos Aires, que demandaron una inversión estatal de más de $8.000 millones y que representará un beneficio para 200 mil habitantes.
“Hoy ponemos en marcha este tramo que, además de darle tranquilidad a miles de bonaerenses, permitirá también recuperar miles de hectáreas para la producción“, expresó el titular de la cartera, Rogelio Frigerio, al tiempo que resaltó que “desde el primer día el presidente y su equipo comenzaron a ocuparse de esta problemática después de décadas en las cuales no se invirtió un solo peso en obras para amortiguar el impacto del cambio climático”.
Por su parte, el secretario de Infraestructura y Política Hídrica, Pablo Bereciartua, sostuvo que la licitación “pone de manifiesto, por la magnitud y los montos, el creciente interés de los inversores por el plan de infraestructura que se está llevando a cabo en Argentina”.
“Esta es una obra fundamental para una de las zonas productivas más importantes del país y beneficiará a las economías regionales de la región pampeana”, agregó Bereciartua.
Según indicaron datos oficiales, las obras demandarán una inversión total de $8.241.725.525 y permitirán el saneamiento de 35 mil hectáreas en forma directa y 1,3 millones en forma indirecta.
Cabe recordar que el proyecto de ampliación del río Salado fue confeccionado para evitar inundaciones de acuerdo con los lineamientos y criterios técnicos del Proyecto Ejecutivo de Obras para el Plan Maestro Integral del Río Salado de la Provincia de Buenos Aires, que consta de cuatro etapas.
El tercer tramo contempló la adecuación, ensanche y profundización del cauce del río, de modo de permitir el escurrimiento encauzado de los mayores caudales estimados para cada tramo en estudio.
