El presidente Mauricio Macri se reunió el sábado con el papa Francisco en el Vaticano. El encuentro duró 22 minutos y estuvo marcado por una fría formalidad que contrasta con los gestos que el Pontífice solía tener con el gobierno kirchnerista, según publica Infobae.
La forma en que se desarrolló el encuentro generó infinitas lecturas políticas. Esta mañana, la gobernadora María Eugenia Vidal compartió un acto con el jefe de Estado. Según relató, Macri calificó el cara a cara como “muy bueno”. No obstante, pidió “cuidar al Papa y no politizar todo lo que hace”.
“Yo no puedo ser objetiva porque tengo una relación de mucho afecto de mi época de ministra de Desarrollo Social de la Ciudad, donde vi todo el apoyo del entonces arzobispo de Buenos Aires al trabajo de los curas villeros”, declaró Vidal en diálogo con Oscar González Oro en Radio 10.
Sin embargo, especificó: “Siento que más allá de las lecturas y las interpretaciones fue una reunión buena porque se habló de los temas que había que hablar, que son los mismos que les preocupan a los argentinos”.