“Yo creo que han sembrado bastante algodón porque no han podido sembrar girasol, pero están decepcionados con el precio, que ha ido bajando desde hace unos meses y hoy estará prácticamente al 60 % del precio al que cobraron la cosecha de este año”, expuso Jorge Vartparonian, vicepresidente de la Cámara Algodonera Argentina, respecto a la situación de los productores algodoneros. Asimismo, expuso que el tema de la retención “es algo muy molesto para ellos porque con esto van a pérdida”.
Por otra parte, informó que se han sembrado alrededor de 300 mil hectáreas, mientras que la intención de siembra inicial era de 400 mil. “Yo no creo que se llegue a eso”, observó, “además hubo algunos problemas de lluvia e inundaciones. Yo creo que van a estar en 300/320 mil más o menos”.
En cuanto a la presencia del picudo algodonero (anthonomus grandis), la plaga más destructiva del algodón, comentó que “en el Paraguay está completamente fuera de control y nuestro SENASA, que tiene un convenio con el Paraguay, no ha trabajado tan intensamente como debería haberlo hecho, tal vez por falta de recursos”. Anunció que este año en la Argentina hay 4 mil hectáreas infectadas por el picudo que fueron tratadas por el SENASA, es decir que el costo no fue asumido por el productor.
Finalmente, Vartparonian expuso que “si estas 4 mil hectáreas se multiplican, el año que viene llegará un punto donde el productor va a tener que sacar la plata de su bolsillo para comprar los insecticidas. Eso, sumado al bajo precio y a la pérdida del rendimiento debido al picudo, hará que directamente no sea viable el algodón”.
