Tras el encuentro realizado en las poblaciones de Laguna Yema y Las Lomitas entre productores del centro oeste formoseño con funcionarios y técnicos provinciales, se generó expectativas por la puesta en marcha del plan ganadero formoseño.
Algo para destacar son las características integrales de la propuesta que se orienta a mejorar las condiciones de manejo de los rodeos, fomentándose su evolución en cantidad y calidad para que mejore la rentabilidad y aumente el interés en el trabajo de campo.
El respaldo del Estado para que los ganaderos tengan sus lotes en condiciones e implanten pasturas, de tal modo que se pueda dar un reaseguro en el desarrollo de sus haciendas, sobre todo en épocas donde las condiciones climáticas no son favorables en esa región, fue uno de los aspectos que mereció un tácito reconocimiento de los lugareños.
Fue otra de las reuniones programadas desde los niveles oficiales para que haya una comprensión acabada acerca de los propósitos que movilizaron a lanzar esta iniciativa que prevé la duplicación del actual stock bovino para llevarlo a cerca de 3,5 millones de cabezas de modo tal que Formosa pueda lograr el ingreso de recursos genuinos a través de la colocación en el mercado exterior de sus reses criadas y terminadas en la provincia.
Hubo una concurrencia mayoritaria de productores criollos y aborígenes de la jurisdicción del bañado La Estrella en el contexto de un diálogo que fue abarcador ya que no solamente implicó una meticulosa exposición sobre las novedades que el plan ganadero habrá de llevar en materia de infraestructura.
También se refirieron a la genética y el manejo de pasturas, y lo que tiene que ver con las garantías que se les ofrecen a los allí afincados respecto de la tenencia de las tierras.
Sobre este tema hubo una profusa información a los fines de evitar malas interpretaciones partiéndose de criterios equivocados existentes a causa de una malintencionada versión que se hizo circular en la zona.
A todo ello se le sumó lo referido al plan de regularización de las tierras fiscales en la jurisdicción del bañado que abarca 175.000 hectáreas y el plan general de ordenamiento que involucra a poco más de 2 millones de hectáreas.
Otros aspectos abordados se refirieron a la consolidación de los circuitos viales puestos al servicio de la productividad para movilizar las cargas hacia los mercados, la nueva matriz energética con la eventual llegada de mayores flujos eléctricos y gasíferos y los efectos positivos que derivarán del manejo de los recursos hídricos en general y de la obra hidrovial de la Ruta 28, en particular.
Por su parte, el ministro Ibáñez reconoció que en los momentos difíciles se acompañó a los pequeños productores ganaderos. Se refirió a las inundaciones provocadas por la crecida del bañado La Estrella, por lo que tuvieron que reubicar y movilizar el ganado.
También se refirió a los trabajos mancomunados y al apoyo a los planes oficiales provinciales de asistencia en marcha y habló de los planes de viviendas, traducidos en Viviendas Paippa, y señaló que los objetivos están puestos en avanzar en obras de caminos y mejoramientos de los lugares donde viven y trabajan.