En el marco del XXV Congreso Argentino de Horticultura que se desarrolla en Corrientes, se realizó un simposio sobre cultivo de tomates y pimientos bajo cubierta centrado en el control biológico de las plagas para evitar el uso de agroquímicos.
El ingeniero agrónomo, Carlos Silvestre y la directora de Producción Vegetal del Ministerio de la Producción, Mariela Pletsch, analizaron los resultados obtenidos en Corrientes y explicaron que la tendencia cada día crece más.
En diálogo con el diario El Litoral, Pletsch explicó que “en el 2007 se comenzaron con las investigaciones para la implementación del control biológico en cultivos bajo cubierta de tomates”. El sistema implica reemplazar el uso de agroquímicos y en su lugar controlar a las plagas ya sea liberando determinados insectos en las plantaciones, permitir que actúen otros controladores nativos, o bien colocar trampas de feromonas.
“Estas acciones, además de no afectar al medioambiente, al productor y al consumidor, son mucho más efectivas que el uso de los agroquímicos porque muchas veces cuando estos se usan con frecuencias, las plagas generan una resistencia y disminuye así la efectividad del control de la plaga”, comentó. Y precisó que en Corrientes en el 2010 el Inta, el Ministerio de la Producción y productores realizaron la primera experiencia de control biológico en pimientos.
El área donde se aplicó fue de unas 20 hectáreas. “El año pasado se elevó a 48 hectáreas y este año ya se implementen en 95 de las 300 hectáreas de pimiento que existen en la Provincia”, indicó la funcionaria.
En tanto que “con la producción de tomates recién este año arrancamos con la producción agroecológica. Sistema que se está aplicando sobre unas 20 hectáreas y la idea es seguir avanzando, en especial, teniendo en cuenta que existe una superficie plantada de mil hectáreas en la provincia”, dijo.
Por último, Pletsch remarcó que al principio al productor le puede parecer más costoso el control biológico pero con el tiempo comprueba que es más económico y que su producción es sana, no generando daño al ambiente ni a los consumidores.
