Con la premisa del agregado de valor y de la integración de las cadenas productivas, Red Surcos está llevando adelante una iniciativa junto con la Cooperativa Agrícola Ganadera Tambera de la localidad de Monje (provincia de Santa Fe).
En el esquema, el elemento fundamental es el aceite de soja desgomado que produce la Cooperativa en su propia planta y que Red Surcos utiliza para la formulación de fitosanitarios, para de esta manera reemplazar los derivados del petróleo.
Carlos Calvo, presidente de la compañía, explicó a Infocampo: “La Cooperativa de Monje es nuestro cliente desde hace 25 años, y desde este año comenzamos a comprarle el aceite de soja que producen en su planta para utilizarlo en la formulación de fitosanitarios. La idea es trabajar en la integración de toda la cadena y conseguir beneficios para ambos”.
En este contexto no sólo la integración es el principal factor, ya que con la utilización del aceite de soja en lugar de los derivados del petróleo la firma distribuidora y formuladora de agroquímicos logra abaratar sus costos entre un 20 y un 30%. “También se consigue un producto más amigable con el medio ambiente, es decir menos fitotóxico. Al mismo tiempo mejoramos la performance de estos productos porque tienen mejor acción y rinden más”, sostuvo.
En la ecuación en la que también están incluidas los productores, según Calvo, hay una muy buena receptividad de estos productos, sobre todo porque en los números finales significan un ahorro considerable para el productor, ya que rinden mucho más que los que están formulados con derivados del petróleo.
La compañía formula sus productos en su planta ubicada en Lomas de Zamora (provincia de Buenos Aires) y cuenta con más de 24 centros de distribución, donde comercializa productos de otras compañías y los suyos con marca propia, a la vez que ofrece servicios para el agro.
En la misma línea, la Cooperativa Monje tiene más de 350 asociados; la fábrica de aceite de soja cuenta con una planta productora de alimentos balanceados y ofrece el servicio de acopio, además de oficiar de distribuidora de insumos en la zona.
Por el momento, Red Surcos consiguió la aprobación del Senasa y ya está comercializando dos productos con estas características: el insecticida Microactive, en base a cipermetrina, que con el aceite de origen vegetal logra una mejor emulsión. El otro producto es utilizado en las plantaciones de cítricos para controlar las plagas y lleva el nombre de Vegetoil.
Esta iniciativa se está concretando desde principios de año y convierte a la empresa distribuidora de insumos en la primera de la Argentina en utilizar aceite de soja en la formulación de sus productos.
Además de reducir los costos y la mayor efectividad, es clave que el aceite de origen vegetal tiene una mayor disponibilidad en el mercado y trae aparejado trabajo para los productores locales. Distinto es el caso de los derivados del petróleo, que son importados.
Calvo detalla que la primera compra de aceite de soja a la Cooperativa de Monje fue por 100.000 litros, pero a medida que se incrementen las ventas, de la mano de futuros productos que lanzarán al mercado, ésta ascendería a alrededor de un millón de litros, y en lo que respecta al precio, la compañía paga el precio internacional de pizarra para el producto.
Yanina Otero
(Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario)
