“Las perspectivas para el campo son malísimas porque no hay nada en claro de parte del gobierno y de las autoridades como para que podamos avanzar. Todo es incierto. Hoy queremos cosechar maíz y no hay cupos en los puertos. No se entiende está política. Necesitan dinero y no aceptan maíz para exportar. Así, no hay reglas claras para continuar y retrocedemos ya que no podemos invertir para actualizar nuestros equipos. Estamos mal”, afirmó a “Siempre que llovió…, paró”, Fredy Simone, Presidente de CBCR (Cámara Bonaerense de Contratistas Rurales).
Al consultarlo sobre la cosecha, Simone destacó que “los maíces no vienen bien porque hemos sufrido una seca fuerte en el centro de la Provincia de Buenos Aires que los afectó mucho, pero creo que lo vamos a complementar con la soja de segunda, que está andando mejor de lo esperado”, señaló, antes de puntualizar que “Hay muchísimo endeudamiento en el sector. Los contratistas siempre nos hemos endeudados para comprar o implementar tecnología, por lo menos hasta el año pasado donde la mayoría de los contratistas paramos la pelota y no compramos más nada hasta que no hay una regla clara que nos permita amortizar mucho más fácil la herramienta”, afirmó.
Respecto a los arrendamientos para la nueva campaña, consideró que “No creo que se abaraten los precios porque los dueños de campos tienen una presión impositiva importantísima, pero sí están entendiendo que ellos también tienen que tomar un poco de riesgo, y tal vez puede ser favorable a la hora de arreglar un alquiler, o un campo en aparcería, que sería lo ideal para todos. Así es más fácil y tendríamos mucho más poder adquisitivo nosotros como para seguir alquilando”, dijo
En cuanto a las perspectivas, Simone fue contundente: “Estamos esperando que el Gobierno nos dé una respuesta, o que ponga reglas claras para que se siembre el trigo porque la realidad es que como contratista o productor lo necesitamos. Necesitamos cosas concretas y factibles de cumplir. Si bajan un línea de que sembremos trigos lo haremos, pero con reglas claras. Así la economía del país se movería mucho más en noviembre, diciembre y enero, cosa que no está sucediendo y es malo para todos, desde el contratista al camionero, pasando por el almacenero”, finalizó.
