La fertilización es una de las principales prácticas culturales que se realizan durante el cultivo de los cítricos, y sin dudas, constituye -después del riego- el segundo factor limitante de la productividad.
Con la fertilización lo que se busca es incrementar la fertilidad natural del suelo y, por lo tanto, obtener mayores rendimientos. También se busca suplir los nutrientes que faltan en el suelo y restituir los elementos extraídos por el cultivo.
Por ello, los expertos de la Estación Experimantal Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC), de Tucumán, consideran que cuando un nutriente se encuentra en la planta en estado deficitario, al aumentar su aporte se consiguen mayores niveles de producción, que compensan el costo de la aplicación del abono suplementario.
Sin embargo, los investigadores consultados por Infocampo coincidieron en que, a partir de determinados niveles de este elemento, el incremento de esa cosecha es decreciente, alcanzándose un nivel crítico, en el que el mayor gasto de fertilizante deja de compensar la mejora en el rendimiento de la cosecha.
Por ello, advirtieron que tanto el déficit como el exceso de abono son perjudiciales para cualquier cultivo.
En este sentido, recomendaron un conjunto de estudios técnicos y químicos que es conveniente realizar.
Análisis del suelo y agua: aportan información sobre los nutrientes que se encuentran en el suelo en forma asimilable, así como sobre los aportes por el agua de riego. Además, aportan datos sobre las características físico-químicas del suelo, que inciden sobre el comportamiento de los fertilizantes.
Análisis foliar: informan sobre el nivel real de absorción de nutrientes que tienen las plantas; indican la presencia de carencias y señalan la existencia de antagonismos entre nutrientes.
Características del arbolado: la variedad, patrón, edad del arbolado, desarrollo vegetativo y cosechas permiten evaluar las necesidades nutritivas de la plantación.
Características de la plantación: la profundidad del terreno, drenaje, modalidad del cultivo, sistema de riego, etc, permiten valorar algunos factores que afectan la eficacia de la utilización de los fertilizantes. Así como programar la forma de aplicación de los mismos, para conseguir una máxima eficacia en su absorción por la planta.
Daniel Vaca | Corresponsal de Infocampo en Tucumán
