“Realmente que se postergue una mejora en nuestros acuerdos comerciales no es bueno, de por sí realmente nosotros como sector agropecuario argentino, que somos competitivos, tenemos una oferta exportable competitiva a nivel internacional, estamos buscando que la Argentina logre más acuerdos comerciales para poder insertarnos mejor comercialmente en el mundo”.
También indicó que “sin duda este proceso de negociación no es fácil, hubiésemos querido que se lograra algún consenso, pero bueno hay que evaluar más profundamente este perfil de gobiernos, que tenemos en la región, y que hoy están defendiendo posiciones e intereses contra los grandes bloques comerciales, lo mismo está pasando en la OMC, es una nueva modalidad en los países en vías de desarrollo que se juntan y tratan de balancear la cancha para tratar de que sus intereses estén presentes en las negociaciones”.
En este sentido, comentó que el tema de los subsidios agrícolas “estaba parcialmente tratado, y sin duda ahora en diciembre, en Hong Kong, vamos a volver a tratarlo”.
El especialista consideró que “esta postergación del ALCA es una respuesta para ver qué ocurre en la OMC”.
Con respecto a las negociaciones, Rocatagliata dijo que “están siendo muy intensas, el G-20, del cual formamos parte la Argentina con Brasil, India y China, están poniendo todo sobre la mesa, propuestas bastante duras, para seguir avanzando en la reforma comercial y donde se han puestos los ojos fue en la UE, que tenía que ceder sobre todo en acceso a mercados, un tema que es clave”.
El dirigente de la SRA explicó que lo fundamental, más allá de que los subsidios comiencen a proyectarse hacia la baja, “es tener un acceso a mercados que nos permita lograr mayor precio. Ese objetivo es clave”, resumió.
En este sentido, citó ejemplos en cuanto a problemas que tiene la Argentina para poder ingresar los productos a la UE: “En carne tenemos aranceles fuera de lo que es cuotas, como la Hilton, que pueden llegar a alcanzar hasta el 150 o 170 %, fuera de una cuota, o sea que muchas veces es imposible seguir exportando. En lácteos tenemos aranceles en la UE altísimos, aranceles en Japón de más de un 500 %, para ingresar con manteca. Se van acotando los mercados y realmente el total de la producción mundial de estos productos se comercializa muy poco, ya que hay mucho de subsidio y proteccionismo”, concluyó.
