Vender soja en sus precios más altos en tres decenios mientras el maíz flirtea con sus máximos desde 1996 es perder dinero, según Goldman Sachs Group Inc. y Deutsche Bank AG.
El maíz a US$4,55 el bushel es “barato´´, dice el Deutsche Bank, con sede en Fráncfort. Goldman Sachs espera que la soja suba un 29 por ciento en 2008. Los inversores que siguieron el consejo de los bancos y compraron materias primas el año pasado ganaron dinero porque el índice GSCI de Standard & Poor’s subió un 33 por ciento, superando el 3,5 por ciento del S&P 500 y el 9,1 por ciento de rentabilidad que dio la deuda del Tesoro estadounidense, según datos compilados por Merrill Lynch & Co.
El aumento de la renta personal, desde Shanghai hasta Sao Paulo, está llevando a una mejora de las dietas alimenticias y presionando la oferta de soja y maíz en un momento en que los precios de la energía están favoreciendo la venta de biocombustibles. Aún después de subir un 17 por ciento en 2007, el precio del maíz es de unos US$2 el bushel ajustado por la inflación, comparado con un máximo de US$7,80 en 1974.
“Estamos en las etapas iniciales de un auge que podría durar 20 años´´ en la agricultura, dijo Christopher Wyke, responsable de producto en Schroders Plc, en Londres. El ejecutivo gestiona US$3.500 millones en materias primas y está comprando más contratos de maíz y soja al tiempo que reduce las participaciones en energía. “Los precios están en niveles históricamente bajos´´, dijo.
Ni desde las malas cosechas de la Unión Soviética en los años 70 habían subido los precios de los alimentos tan rápidamente. El presidente del Banco Central Europeo, Jean- Claude Trichet, dijo el pasado 19 de diciembre que la región se enfrenta a un “período más prolongado´´ de lo esperado de elevada inflación por los precios de los alimentos y el combustible.
Los inventarios mundiales de soja se reducirán un 23 por ciento en el período de comercialización de 2007-2008 a 47,3 millones de toneladas desde un récord de 61,1 millones el año previo, según estimaciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
Los consumidores de soja se enfrentan a un “gran déficit’ en la oferta por el aumento de las ventas a China y de la fabricación de biocombustibles, dijeron analistas de Goldman, dirigidos por Jeffrey Currie, en un informe el 11 de diciembre.
Goldman predice que la soja alcanzará los US$14,50 el bushel. Inversores que compren US$10 millones en contratos con fecha noviembre en el mercado de futuros de Chicago ganarían US$2,9 millones si se cumplen los pronósticos. Un fondo de cobertura que pidiera dinero prestado para apostar aprovechando el diferencial podría convertir esos US$10 millones en US$59 millones.
Fuente: Bloomberg
