“Teníamos que generar puestos de trabajo genuino y para lograr eso teníamos que atraer inversiones, por eso Uruguay no impuso retenciones. No era nuestra política, y así crecimos”. Así lo indicó Tabaré Vázquez, ex presidente de Uruguay en el marco de la 124° Exposición de Ganadería, Agricultura e Industria Internacional.
Humilde, con un tono de voz tranquilo y abierto al diálogo, Vázquez explicó que los problemas coyunturales y las estrategias para hacer crecer al sector agropecuario de Uruguay se habían resuelto mediante acuerdos entre el Gobierno y las entidades gremiales del campo uruguayo.
Comentó como, por ejemplo, se sentaron en la misma mesa representantes del Gobierno, dirigentes de las entidades agropecuarias, de la industria frigorífica y carniceros para poder abastecer el mercado interno de carne a precios razonables sin desaprovechar las oportunidades de los mercados internacionales. ‘Generamos acuerdos para lograr ciertos cortes de carne a precios más baratos’, dijo Tabaré, y agregó que en el marco de ese acuerdo fue que se consiguió el ‘asado de Pepe’, a un precio más accesible a los sectores más bajos.
Vázquez contó que ese corte se llamó así ya que el actual presidente uruguayo, José Mujica, había sido quien había impulsado esa concesión, como ministro de Agricultura de Uruguay. ‘Se aceleraron muchas políticas en el marco del diálogo, sin presiones de ningún tipo’, dijo Vázquez.
Según el ex presidente uruguayo, fue a través de esta política de generación de consensos que Uruguay consiguió mantener la inflación en los niveles que el Gobierno había previsto, entre un 3,5 y 7%, logrando a la vez aumentar el empleo y el salario a niveles similares a los de la Argentina.
Vázquez también se refirió a su política internacional y contó que Uruguay implementará en la práctica un acuerdo para exportar carne ovina a Estados Unidos, que se consiguió a través de la negociación bilateral iniciada con el ex presidente de los Estados Unidos, George Bush, cuando ambos eran los primeros mandatarios de sus respectivos países.
La firma de ese convenio se hizo en Mar del Plata, en 2005, durante la Cumbre de las Américas, oportunidad en la que Bush fue recibido con un escrache.
