El paro contra el Gobierno nacional al que convocaron ayer el camionero Hugo Moyano y el gastronómico Luis Barrionuevo va cobrando fuerza aún antes de que los gremios definan la fecha de la protesta. Esta mañana, Roberto Fernández, de la UTA, confirmó la adhesión de los colectiveros, y el titular de la CTA opositora, Pablo Micheli, dio por hecho que la central que dirige se plegará a la huelga.
“Si se concreta un paro nacional, creo que sería lo más justo en este momento de crisis que estamos viviendo”, evaluó Micheli en declaraciones a Jardín de Gente, por Radio Ciudad. “Nosotros ya habíamos anunciado que en abril íbamos a hacer una jornada nacional de lucha con movilización y paro (…) Por los puntos que se han planteado y sumando algunos otros, creo que vamos a coincidir en una acción conjunta” con las CGT opositoras, agregó.
Así, el paro de Moyano y Barrienuevo ya cuenta con el respaldo de sus dos CGT –Azopardo y Azul y Blanca, respectivamente-, la participación casi segura de la CTA del estatal Micheli y el apoyo de la UTA: hoy Fernández dijo que los colectiveros pararán a menos que el Gobierno “se llame a la reflexión y se siente a dialogar”, según publicó El Cronista.
Ayer, las centrales del camionero y el gastronómico pasaron a la ofensiva en su estrategia de confrontación con el Gobierno: se declararon en estado de alerta y sesión permanente con un plan de acción que culminará con un paro nacional, cuya fecha aún no fue definida pero que podría concretarse a mediados de abril. Dejar en suspenso la fecha de la huelga fue la condición que habían planteado Omar Maturano (La Fraternidad) y la UTA para participar del plenario convocado en por las dos CGT en la sede de la calle Azopardo.
“Llegó la hora de exigirle al Gobierno el cumplimiento de nuestros reclamos”, desafió Moyano durante su discurso en el plenario y reclamó: “El día del paro que no se mueva ni un alfiler en el país. Nadie se tiene que mover ese día”.
Micheli también habló hoy del conflicto docente, que sigue sin solución en Buenos Aires, Misiones y otras provincias, y lo hizo cargando duramente contra los gobernadores: “Es preocupante y lamentable la actitud de los gobiernos. La gente no está dispuesta a que otra vez se tome como variable de ajuste a los trabajadores y se les sigan pagando salarios miserables”.
“Ojalá que las clases empiecen el lunes y que esto se resuelva de la mejor manera, pero la llave no la tienen los maestros (…) La culpa la tiene el Gobierno, que dilapida fondos por todos lados en el lugar de pagar lo que hay que pagar”, se quejó.

