José María Campagnoli no tiene dudas: el juicio en su contra es en realidad una “persecución política”. Cuando mañana se siente frente al jurado de enjuiciamiento que definirá su suerte como fiscal de instrucción penal, espera que los testimonios que acercó “echen luz” sobre su proceder . El fiscal suspendido fue denunciado por la procuradora general, Alejandra Gils Carbó, cuando descubrió una trama societaria que habría utilizado el empresario kirchnerista Lázaro Báez para lavar dinero.
-Llegó la hora del jury, ¿cómo llega al proceso?
-Estoy confiado; tengo fe de que podemos dar vuelta el juicio. La Cámara del Crimen convalidó la legalidad de las investigaciones y se las envió al juez Sebastián Casanello. Lo único que hice fue investigar.
-El Tribunal de Enjuiciamiento lo suspendió por cuatro votos contra tres. ¿Por qué podría lograr ahora un fallo a favor?
-La acusación no tiene sustancia. Confío en que algún voto se puede dar vuelta.
-Anteayer, Página 12 publicó una nota donde lo acusa de mandar a tomar fotos que se usaban para inducir a víctimas de delitos a “identificar” a sus supuestos agresores. ¿Fue así?
-Me esperaba un ataque, pero no tan bajo e infundado. Se trata de una campaña de desprestigio porque saben que no tienen un caso en mi contra.
-¿Por qué cree que aparecen en este momento?
-Me persiguen por haber investigado a Lázaro Báez y todo lo que surgió en estos días es una operación para influenciar a los medios del jury; probablemente, porque se dan cuenta de que en el juicio contra mí no tienen nada. Me quisieron convertir en un monstruo.
-¿Usted ordenó realizar esas fotografías? ¿Cómo lo explica?
-Son todas mentiras. Las fotografías que se almacenaban en mi fiscalía eran las que tomaba la policía cuando detenía a una persona con autorización judicial; son fotos que ya están en poder de la policía y que la Cámara de Casación avaló que las tuviera también la fiscalía.
-¿Era una práctica habitual?
-En la resolución de creación de la Fiscalía de Saavedra preveía la instrumentación de un registro fotográfico que pudiera servir como herramienta para el esclarecimiento de hechos con autor desconocido.
-En la nota dicen que son más de 1500 imágenes, en su gran mayoría de personas que viven en el barrio Mitre. ¿Cuál es su relación con el barrio?
-Entré una sola vez a llevar colchones luego de una inundación. Y gracias a que la gente me conoce es que sigo caminando tranquilo por mi barrio y por la calle, y todo lo que recibo es apoyo. Quieren construir una imagen de mí que no se corresponde con la realidad. Soy un fiscal que cumple y hace cumplir la ley.
-La publicación se realizó en un medio ligado al Gobierno. ¿Esperaba una campaña en contra?
-Todas estas denuncias que surgen en medios oficialistas son parte de la defensa de un socio del poder. Todo hace pensar que han puesto recursos del Estado al servicio de mi difamación. Lo ilegal es que alguien le pase esas fotos a un diario. No tengo dudas de que buscan influenciar en el jury.
-Si finalmente el jurado de enjuiciamiento decide removerlo de su cargo, ¿qué sigue?
-Vamos a apelar.
-Después de lo que le ocurrió, ¿sigue confiando en la Justicia?
-Soy un hombre de la Justicia; confío en la Justicia. Durante el proceso se han manifestado muchas organizaciones de abogados.

