Los productores agropecuarios de General Villegas están atravesando un difícil momento a raíz de las inundaciones que afectan a ese partido del oeste bonaerense. Y no es la primera vez. Fueron tres veces en menos de una década. Por eso, los chacareros agrupados en Federación Agraria General (FAA) de esa región, reclamaron que se concreten con premura las obras para evitar las consecuencias de las inclemencias climáticas.
“Contra la naturaleza no se puede, pero sí realizar obras y acciones tendientes a prevenir y acotar los efectos adversos. En la zona recibimos el agua de otras provincias, sin tener Buenos Aires un sistema de conducción y retención, con canales y represas”, dijeron en un comunicado.
Sólo en octubre llovieron entre 250 y 300 milímetros en el partido, y en los últimos 12 meses cayeron más de 1.400 milímetros.
“Tenemos más del 70 % del partido afectado por el agua, con la particularidad de tener una superficie de escasa pendiente, por lo que hace lento el escurrimiento natural, además, las napas muy arriba, dificultan la absorción”, explicaron los productores villeguenses.
Los chacareros se quejaron porque el tramo de ruta nacional N° 33 que atraviesa al partido de sur a norte y une los puertos de Rosario y Bahía Blanca, está totalmente destruida con banquinas abandonadas.
“La ruta nacional 188 fue desbordada por el paso del agua en el tramo entre Villegas y Ameghino, al igual que la ruta nacional 226 entre Gral. Villegas y la localidad de Cuenca (Tres Algarrobos) que pertenece a Carlos Tejedor, que también está comprometido por la situación hídrica”, indicaron.
Asimismo, el aeródromo local quedó ayer quedó bajo agua, impidiendo los aterrizajes de las aeronaves que pretenden sobrevolar las zonas inundadas.
Ya en febrero pasado, Villegas se había visto amenazado por las aguas del Río Quinto, que nace en San Luis y pasa por Córdoba, engrosando su caudal durante su trayectoria ya que absorbe los excesos de lluvias cordobeses, entrando a Buenos Aires por la zona cercana a la localidad de Banderaló, primera población del oeste villeguense. “En esa ocasión, el casco urbano se salvó, no así los campos de la zona, quedando bajo agua numerosas hectáreas de soja y maíz, así como tambos abandonados. Las localidades de Coronelas Charlone, Santa Regina y Cañada Seca también sufrieron los efectos del brazo norte del Quinto”, señalaron los productores.
“En el Partido de Gral. Villegas hace tiempo que estamos huérfanos de atención por parte de Estado Nacional y Provincial”, lamentaron los federados.
De acuerdo a los federados, en el partido de Villegas se generaron U$S 283 millones de por la producción de soja este año. “De esa cifra, U$S 84 millones se aportan en concepto de retenciones. El 5 % de la postergación de la baja de los derechos de exportación, significan 14 millones de dólares”, contaron.
Según los agricultores, en maíz la producción representa U$S 110 millones. Además, en la zona existe una cuenca lechera y un polo ganadero importante, ambos seriamente afectados en la actualidad.
“Estos números demuestran que aportamos mucho a las economías de la provincia y la Nación, pero al parecer sufrimos del “Alzheimer” de parte de los gobiernos”, reclamaron.
Por su parte, afirmaron que “las líneas de crédito anunciadas este jueves durante la visita de funcionarios provinciales, difícilmente puedan ser tomadas por los productores federados, ya que muchos no tienen carpetas con el status que piden los gerentes del Banco Provincia”.
Los chacareros de Villegas pidieron asistencia financiera directa para palear esta catástrofe climática. “Como demostramos aquí, esos recursos que pedimos saldrían desde nuestros propios campos”, destacaron.
