âEl contenido de agua de los perfiles invita a adelantar fechas y acortar ciclos, pero el pronóstico del tiempo empuja a lo contrario, es decir, atrasar fechas y alargar ciclosâ, es la opinión de Héctor Baigorri, asesor privado especialista en soja, quien evaluó cuáles son las claves para pensar la próxima siembra de soja.
De esta manera, todo indica que el que tenga napas con buen caudal puede aprovechar el mayor potencial con seguridad y apuntar a muy altos rendimientos. En el caso de no tener napas, si ocurriera una primavera seca, y sin saber todavía que puede pasar en enero, febrero y marzo, va a ser necesario diversificar cultivares y fechas. En este sentido, la recomendación es empezar temprano y seguir distribuyendo fechas de primera en
principios de octubre y hasta mediados de noviembre.
Para tener un mayor rendimiento el paso inicial es saber con cuánta agua se empieza la campaña, ya que hay sitios donde se cuenta con ayuda de napas freáticas. âEste año están con muy buenas reservas, para aplicarle a los cultivos. La capacidad que tiene un suelo de ofrecerle agua al cultivo depende de su textura, los arenosos menos agua, los arcillosos más aguaâ, destacó Baigorri.
Es fundamental hacer muy bien la cuenta. Quien tiene napas ya sabe que arranca con un piso de rendimiento muy alto, que varía de ciclos mas cortos y fechas más tempranas, y le aseguran mayor rendimiento, asi que quien esteÌ en esta condición está en una situación bajo riego y puede apuntar a estos rendimientos tan altos con variedades de ciclos cortos.
Para saber si hay agua en una napa, el especialista recomienda la utilización de un barreno con extensiones. âNo se deben tener en cuenta presunciones y razonamientos a partir de extrapolaciones de otras zonas o sitios relativamente cercanos o por la presencia de charcos o lagunas o datos de campañas anteriores; su presencia y profundidad son lo suficientemente variables como para chequearlas efectivamenteâ, recomienda Baigorri.
En general hacen falta barrenos de dos metros, pero Baigorri recomienda barrenos más largos, porque âpuede ocurrir que la napa esté a dos metros, pero apoya en una capa de arcilla que está a 2,30 metros y sólo hay 30 cm de agua acumulada arriba de esa capa de arcillaâ. Puede haber medio metro de agua, un metro o dos, y es necesario saber exactamente cuánto hay.
Un suelo arenoso tiene 400 mm por cada metro de perfil saturado, lo que llamamos napa, que es más de media cosecha asegurada.
Entre las características importantes a tener en cuenta también se destacan las características abióticas del ambiente (climáticas y edáficas), las bióticas (enfermedades, plagas y antecedentes), y las cualidades de los cultivares posibles a utilizar (ciclo,juvenilidad, hábito de crecimiento, rendimiento, comportamiento sanitario, vuelco, respuesta fenológica al atraso de la fecha de siembra y calidad industrial).
