La semana pasada, la entidad había proyectado 5,45 M de hectáreas implantadas con trigo en la Argentina. Con el 90% de la superficie cubierta, la Bolsa corrigió sus proyecciones a 5,43 M de hectáreas, ante la persistencia de déficit hídricos en algunas regiones.
Puntualmente, el informe identificó al sur de La Pampa y los partidos bonaerenses de Adolfo Alsina, Norte de Puán y parte de Saavedra, regiones donde âlos muy escasos o nulos aportes configuraron un triángulo muy deficitario con severas restricciones de agua para lograr las siembras ideadasâ. En estas zonas, no se logró sembrar más del 50% de la intención.
Distinta fue la situación en la subregión Mar y Sierras bonaerense, donde los 55 milímetros caídos propiciaron la conclusión de las siembras planificadas.
Asimismo, la mayor oferta de agua permitiría viabilizar planteos de alta productividad, que son fundamentales en vistas a afrontar los altos costos de producción del cereal.
En algunas zonas de los partidos de Tres Arroyos, Coronel Pringles y Coronel Borrego las recargas fueron más limitadas, pero permitirían efectuar las siembras previstas, tal cual ocurriría en la zona de Bahía Blanca.
Estado del cultivo
Con las coberturas concluidas en las provincias norteñas, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y el norte de Buenos Aires la atención se centra ahora sobre la evolución de los plantíos.
Luego de atravesar temperaturas inusualmente elevadas que mayoritariamente determinaron un adelantamiento de las fases iniciales vegetativas causando la formación de un menor número de macollos, sobrevino un clima más frío. Este escenario, particularmente en el centro sur de Santa Fe y el norte de Buenos Aires, mejorará la condición de los cultivos, promoviendo el macollaje de lotes implantados más tardíos.
Por otra parte, detendrá el desarrollo de algunas de las enfermedades foliares que si bien sin mucha presión de ataque, se habían observado en lotes más avanzados.
Girasol
La falta de humedad ralentizó las siembras en las provincias norteñas. Al 4 de julio, el progreso de la implantación alcanzó al 9,2 % de la intención de siembra estimada provisionalmente en 2,46 M de hectáreas, avanzando en tan sólo 1,2 puntos respecto de la semana pasada, pero actualmente demorada en casi 2 con relación a igual fecha del año anterior.
En esta campaña, las coberturas se iniciaron tempranamente en Chaco, aprovechando la humedad acumulada por las lluvias durante el mes de junio. La intención de siembra estimada en unas 400.000 hectáreas, encuentra actualmente una seria limitante, ante las precipitaciones que no se hicieron presentes en forma generalizada.
De hecho, se estiman necesarios unos 30 milímetros que cubran la totalidad de las zonas productivas de la provincia para alcanzar la siembra intencionada, sino con la mitad del aporte hídrico estimado se llegaría a cubrir unas 300.000 o 330.000 hectáreas.
De todos modos los productores locales sembraron ya unas 190.000 hectáreas, de las cuales aproximadamente unas 60 mil se realizaron mediante la siembra en directa.
Más complicadas por la falta de agua están las demoradas implantaciones en el nordeste de Santiago del Estero, donde las proyecciones apuntan a lograr una extensión en toda la provincia de unas 50.000 hectáreas, para lo cual es necesario el aporte de unos 40 a 50 milímetros.
La ausencia de lluvias está ralentizando también las coberturas en el extremo norte de Santa Fe, para la cual se estima también una expansión del área cultivada. Las heladas recientes, circunstancia climática temida por los productores que sembraron temprano, no ocasionaron daños de significación. Los aumentos previstos para La Pampa, Córdoba y el sudoeste de Buenos Aires, de darse lluvias adecuadas, compensarían parcialmente un eventual recorte en las siembras de las provincias norteñas.
âSe debe considerar también que las coberturas en el sudeste bonaerense no crecerían durante esta campaña; más bien se considera como probable una ligera reducción respecto de la temporada pasada por la expectativa de una mayor siembra con soja en la zona de Tres Arroyosâ, concluyó el trabajo.
