Publicidad Cerrar X

La lectura mejora la inserción en la sociedad

Así lo afirma la Fundación Leer. En pos de ese objetivo trabaja desde el '97

Así lo afirma la Fundación Leer. En pos de ese objetivo trabaja desde el '97
infocampo
Por Infocampo

En poco tiempo logró reunir a un grupo significativo de empresas y voluntarios. Entrevistamos a Patricia Mejalelaty, directora ejecutiva de la organización.

“Lo único que debería responder un ministro de Economía para medir el nivel de un país es cuántas patentes registró en un año.” Esto contaba Juan Enríquez (ex académico de Harvard) en sus habituales desembarcos en la Argentina al explicar que de nuestros problemas se sale con educación. Pero ¿cómo? La realidad duele (ver Números…). “La crisis educativa tiene que ver con falta de políticas de Estado”, es lo primero que contesta Patricia (ver ¿Quién es…) quien dirige a esta Fundación financiada por terceros, con más de 3.000 instituciones que están esperando acceder a sus programas y que están trabajando en más de 500 escuelas de todo el país. “Buscamos el acercamiento de los chicos a la lectura y ayudar a su éxito escolar. Para ello desarrollamos programas educativos con varios ejes: la capacitación de los maestros; la mejora de sus espacios alfabetizadores (eligiendo los textos que ellos necesitan) formando rincones de lectura (que son bibiliotecas informales en donde los chicos pueden acercarse); la alfabetización del grupo familiar (porque es necesario para el niño); el brindar asistencia técnica a los maestros (no alcanza sólo con la capacitación); el poner a disposición de los chicos libros nuevos para que se los puedan llevar a su casa en propiedad para leerlos en soledad o con la familia”, detalla Mejalelaty. Y agrega: “Los programas de lectura de la Fundación apuntan a fortalecer al chico como un lector autónomo”. ¿Y en las escuelas rurales? se le pregunta. “Si bien la realidad de esos cursos, con chicos con edades diferentes, con infraestructura muy precaria, no contribuye a generar las condiciones para la educación, las escuelas rurales tienen alguna fortaleza respecto de las urbanas, como el apoyo de la comunidad local y que no son aprovechadas. Hemos trabajado viendo una respuesta de los padres muy fuerte. Y una avidez por recibir las innovaciones para mejorar su performance educativa”. Concluyó diciendo: “Empecemos con políticas de Estado, que no sea solo enseñar a leer y escribir”.

Números para pensar

Los datos de la problemática argentina muestran que el 70% de los niños es pobre (BBC News, agosto 2002). Y que 6 de cada 10 niños y adolescentes crece y se desarrolla en hogares pobres o indigentes (Censo Indec, 2001) y 1 de cada 4 niños trabaja para poder comer, lo que les impide continuar con los estudios. Otros datos: el 47% de los niños menores de 15 años vive en el 20% de los hogares más pobres (Siempro, año 2004). Esto explica, parcialmente, por qué cada año 68.374 niños de 6 a 11 años dejan la escuela (UNICEF, diciembre de 2004). En este escenario hay 3.695.830 argentinos que nunca terminaron la educación primaria y pasaron a integrar la categoría de analfabetos funcionales, que son aquellos que no tienen la capacidad de comprender lo que leen, ni de expresarse con claridad tanto en forma verbal como escrita. Allí está el 70% de los adolescentes.

Daniel Díaz

Seguí leyendo:

Temas relacionados: