Es una regla fundamental de la economía, cae la demanda, caen los precios. Y así fue. El tomate pasó a ser en los últimos días un producto “de lujo”, debido a las heladas que entre junio y julio afectaron la floración, y por ende, su producción, según publicó Infobae.
Fue por esa razón que, frente al aumento del precio del tomate, que llegó a venderse a 40 pesos el kilo, entidades de consumidores lanzaron un boicot para que los consumidores suspendan la compra de ese alimento.
En el día del cumpleaños número 58 del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, Infobae se comunicó con el Mercado Central de Buenos Aires, y desde allí confirmaron que, gracias a que ha bajado considerablemente la venta en verdulerías y supermercados, el precio de este fruto fundamental para preparar todo tipo de comidas -en especial ensaladas y sándwiches- se vio reducido en un 35 por ciento.
Según informaron fuentes del Central, el cajón de tomate redondo de buena calidad, que el viernes se vendía entre $240 y $280 el cajón (18 kilos), pasó a costar hoy desde $120 hasta $180. Aunque también se ofrece un tomate de segunda mano, más maduro, a 80 pesos el bulto.
En cuanto al costo del perita, que al cierre de la semana pasada rondaba entre los $280 y los $330 (ayer no hubo ingresos), pasó a valer entre $150 y $200 pesos el cajón.
“No sé por qué se transformó en un tema de Estado. Todos los años pasa lo mismo con el tomate y otros productos. Las heladas afectaron mucho el litoral y el norte del país, pero la situación se va normalizar a mediados de noviembre”, estimó un empleado, que explicó que la reducción de precio se debió fundamentalmente a que el tomate “se paró en la calle”.
De esta manera, lo que hoy se está pagando cerca de 28 pesos el kilo, pasará a costar alrededor de $18 una vez que el nuevo precio se vea reflejado en los negocios minoristas. “Sigue estando caro, pero al menos estará más accesible. Hoy mucha gente se queja y lo compra igual, porque es un producto que no se puede suplantar”, señaló un comerciante minorista a Infobae.
Desde el Mercado Central informaron que el tomate no es el único producto “de lujo” que bajó sus precios. La berenjena, que costaba entre 200 y 250 pesos el bulto (18 kilos aproximadamente), y en la calle se pagaba hasta $50 el kilo, hoy vale desde 80 a 100 pesos el cajón.
Lo mismo sucede con el zapallito, inalcanzable desde hace meses, su precio en góndola se asemeja al de la berenjena. Según informaron desde la entidad que maneja Guillermo Moreno, el costo del cajón -unos 15 kilos- pasó de 30 a 50 pesos.
Por el momento es sólo un alivio, porque los precios siguen elevados. De todas maneras, según informó el Mercado Central oficialmente, “la situación se normalizará a mediados de noviembre, cuando se produzca el ingreso de producción del cinturón verde de la provincia de Buenos Aires”.
