“El año pasado hubo buenas y malas noticias. Se proyectaron las exportaciones crecientes, que ya venían del 2004, aumentaron los volúmenes y los valores. Terminamos en 1300 millones de dólares y cerca de las 800 mil toneladas, es un aumento de 1000 millones con relación a 2004, que en términos porcentuales sería del 30%. Se exportó más porque los mercados externos estuvieron muy activos y porque se reafirmó la demanda en el mercado interno”. Así describió el 2005 Héctor Salamanco, director Ejecutivo del Consorcio ABC en una entrevista con Infocampo TV.
Sin embargo, esta escenario tuvo como contrapartida decisiones políticas que afectaron al sector. “Esta buena noticia empañó la política macroeconómica y gatilló algunas decisiones al fin del ejercicio como fue la remoción de los reintegros y la suba de las retenciones. La exportación detrae en volumen una cantidad importante y eso se reciente en el mercado interno, lo que se expresa luego en una suba de precios”, sostuvo Salamanco.
Consultado acerca de los inconvenientes producidos en Brasil por la aparición de los focos de aftosa, el directivo de ABC respondió que esta circunstancia no ayudó al país “porque todas las situaciones de volatilidad nunca ayudan en un mercado que requiere cierta previsibilidad. Esto generó que se aumente el riesgo sanitario en la región, que nos hace iniicar un 2006 con gran preocupación”, manifestó, para después agregar que “empezamos un año complicado, porque la aplicación de estas medidas de comercio exterior erosionan la competitividad, es un 15% que se erosiona el tipo de cambio, en consecuencia se erosionan los ingresos del sector, la rentabilidad y sustentabilidad de la actividad”.
“Lo primero que se debe hacer es revisar estas medidas de comercio exterior, dado que han cambiado los factores que la han originado: los precios del ganado ahora son precios bajos, la industria en enero es un mes de oferta regular con caída de precios y se está agravando el tema con la sequía, lo que provoca una liquidación de stock. Esto hay que trartarlo seriamente y se tiene que revertir”, enfatizó Salamanco.
“Creemos que el gobierno tiene la voluntad de atender la cuestión, compatibilizando dos objetivos importantes. Por un lado, el abastecimiento del mercado interno, a través de distintas herramientas para modular las exportaciones y, por el otro, garantizar el crecimiento sostenido del sector, o sea que aquellas exportaciones viables que sean plenamente rentables para que no se interrumpa el proceso de inversión”.
