En los próximos días, la industria molinera argentina estará dando a conocer su Plan Estratégico (PEM) a cinco años, que lleva como leit motiv “ArgentinaLíder Mundial”.
Es que con cerca de un millón de toneladas de harina de trigo exportadas, la Argentina es el tercer proveedor mundial de este alimento esencial y de altovalor agregado, por detrás de Turquía y Kazajistán y por delante de dos países con larga tradición molinera como son Francia y Bélgica.
“El empresario molinero argentino ha reinvertido las utilidades, cuando las tuvo, dentro de la misma actividad para expandir la capacidad o agregar líneas nuevas como pueden ser las pastas, los alimentos balanceados o los pet foods. Así llegamos a la situación actual en la cual con 13 días de molienda por mes, sobre un total de 25 o 26 estamos en condiciones de abastecer al mercado interno, de manera que contamos con una gran capacidad para seguir trabajando y es allí donde el mercado externo aparece como la vía del crecimiento armonizado”, señala Diego Cifarelli, presidente de la Federación Argentina de la Industria Molinera.
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