En 2007, la molienda argentina de trigo fue de 5,8 millones de toneladas, lo que representa un crecimiento del 11,5% respecto del año anterior. Al mismo tiempo también crecieron las exportaciones hasta las 954.000 toneladas, siendo Brasil el principal destino con el 64% del total.
En este contexto provechoso, la industria molinera, que logró durante 2007 consolidarse en exportaciones, fue beneficiada con las compensaciones otorgadas por el Gobierno.
El fiel reflejo de esta situación son los estados contables de los molinos harineros que fueron parte del negocio. Es así que tanto Molinos Juan Semino como Morixe Hermanos en sus balances cerrados el 29 de febrero de 2008 por el período de nueve meses iniciado el 1 de junio de 2007 consiguieron aumentar en facturación y ventas al mercado externo.
En el caso de Molinos Juan Semino facturó $81,4 millones, esto resulta ser un 63% superior al mismo período del año anterior cuando había alcanzado los $50 millones.
Durante este período la empresa tuvo una producción total de 54.200 toneladas, 40% superior a las 38.700 toneladas a febrero de 2007. En este lapso de tiempo la firma detalla que destinó al mercado interno 40.800 toneladas y 13.100 para exportación.
Este último punto es para resaltar ya que es el valor más alto que consiguió la firma en cuanto a exportación comparado con iguales períodos de años anteriores.
A febrero de 2007 Molinos Juan Semino había exportado un total de 7.600 toneladas, esto quiere decir que de un año a otro los envíos crecieron nada menos que el 72,3%.
Según reza la memoria de su balance la firma espera que sigan creciendo sus envíos gracias a las acciones que está llevando adelante la Federación de la Industria Molinera (Faim).
En este contexto la ganancia final del ejercicio también tuvo un importante incremento llegando hasta los $7,5 millones, lo que quiere decir un 257% más que en el año anterior cuando había trepado a $2,1 millones.
Por su parte, Morixe Hermanos también trae noticias positivas en su balance de nueve meses cerrado el 29 de febrero de 2008.
Las ventas de la compañía crecieron el 71,3% ya que en 2008 alcanzaron los $51,4 millones, versus los $30 millones del año anterior.
Durante este período la molienda de la sociedad se dividió en 48.116 toneladas de producción propia y 11.654 toneladas para terceros. Gracias al stock inicial, las ventas de harinas y subproductos en el mercado local fueron de 79.685 toneladas, lo que representa un incremento del 28% sobre el trimestre anterior y un 28% superior comparado con igual período del año anterior.
En lo que respecta a las exportaciones, para Morixe este es un período emblemático, ya que consiguió entrar al mercado internacional con el envío de 1.481 toneladas, ya que hasta el momento la firma todavía no estaba operando en este segmento desde por lo menos 2004.
Finalmente, el ejercicio bajo análisis arrojó una ganancia de $4,4 millones, pero en 2007 trepó a $10 millones. La explicación de este fenómeno, que con más ventas haya menos ganancias, es que en el período cerrado en febrero de 2007 vendió su planta de Capital Federal por lo que le ingresaron $5 millones a su caja.
