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Nuevo impulso al Programa Agrolimpio

Silvana Capucchio, de la dirección de Sanidad Vegetal del Senasa, describió las características del acuerdo que este organismo de control firmó con Casafe, y que le permitirá implementar el Programa Agrolimpio, para el "manejo y disposición final de envases vacíos de agroquímicos", que pretende mitigar el posible impacto de estos recipientes en el campo.

Silvana Capucchio, de la dirección de Sanidad Vegetal del Senasa, describió las características del acuerdo que este organismo de control firmó con Casafe, y que le permitirá implementar el Programa Agrolimpio, para el "manejo y disposición final de envases vacíos de agroquímicos", que pretende mitigar el posible impacto de estos recipientes en el campo.
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Por Infocampo

Capucchio destacó en Infocampo TV que el proyecto “parte de esta alianza estratégica que establece la cámara (Casafe) con el Senasa, para implementar el programa que ellos están liderando actualmente, que se denomina Agrolimpio”.

La dirigente expuso que se trata de un plan “de manejo y disposición final de envases vacíos de agroquímicos”, y señaló que el programa consta básicamente de dos etapas.

En este sentido, aclaró que la primera fase está relacionada a la “recolección y disposición temporaria de envases vacíos de agroquímicos que, por lo general, constituyen un problema muy grande para los productores”.

Así, manifestó que estos recipientes con frecuencia quedan tirados y abandonados en los lotes y sostuvo que “lo que hacen los productores es acopiarlos transitoriamente, y los termina quemando o enterrando en sus propios campos”.

De este modo, Capucchio consideró que esto constituye “una fuente de contaminación directa”.

En este sentido, afirmó que “el objetivo de este programa es minimizar el impacto que puedan llegar a tener estos envases en el campo”.

Asimismo, el dirigente resaltó que esta primera etapa relacionada a la recolección incluye “el acopio transitorio, con la premisa de que los envases tengan un triple lavado”.

Capucchio aclaró que “esto significa que se haya eliminado todo el remanente del producto que queda dentro del envase”.

Siguiendo con esta línea, la dirigente destacó que los usuarios “deben tomar conciencia de la importancia de eliminar al máximo todo el remanente, para luego acopiarlo transitoriamente”, para agregar que “sino, esto sigue siendo un residuo peligroso”.

La representante de Senasa, explicó que la segunda etapa “es la fase de reciclado de estos productos”.

De este modo, informó que esta tarea es realizada por contratistas de Casafe, “que se encargan de moler y procesar este envase en los distintos puntos de acopio”, para trasladarlo luego a centros de reciclaje en Buenos Aires y en la provincia de Santa Fe.

Capuccio aseguró que “nosotros empezamos intensivamente en la región NEA, porque era justamente donde aún Casafe no había implementado ningún centro de acopio”.

Así, resaltó que “empezamos con el relevamiento previo de esa zona ya que, a través de la Dirección de Sanidad Vegetal, tenemos varios programas fitosanitarios entonces teníamos llegada a la gente de esa zona, a los productores, a las asociaciones, al INTA y al ministerio de la Producción de esas provincias”.

La dirigente señaló que “hicimos el relevamiento previo ahí y estamos haciendo una campaña muy fuerte de capacitación y difusión en la zona”.

En este escenario, comunicó que, la semana pasada, se inauguró el primer centro de acopio. “Es un buen comienzo”, auguró, para agregar que “estamos muy contentos por el esfuerzo y la concientización de la gente de este lugar, este emprendimiento es muy loable para este programa”.

En cuanto a la conciencia de todos los productores, Capucchio argumentó que “saben que hacer con los recipientes pero, a veces, no tienen una solución a las manos”.

Asimismo, la dirigente agregó que “hay mucha gente que es consciente de lo que significa un envase en el campo, de que no tiene que estar a las manos de los niños ni de ninguna persona que no intervenga en la cadena productiva porque simplemente hay que minimizar ese impacto, tanto para los seres humanos como para los animales domésticos, como para el ambiente en general”.

Sin embargo, consideró que “no tienen una solución como por ejemplo, la posibilidad de llevarlos a un centro de acopio, para que después venga alguien y se lo lleve definitivamente”.

Verónica Scornik

vscornik@infocampo.com.ar

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