Los precios del trigo alcanzaron niveles récord en los últimos días. Los molinos harineros consiguen abastecerse de materia prima a 1.780 pesos la tonelada, contra los 1.720 pesos que se pagaron por la soja.
Según datos del mercado, los molinos necesitarían comprar todavía cuatro millones de toneladas de trigo (Marcela Marbián/Archivo).
Los resultados que exhibió la última campaña triguera en el país, con la menor siembra de los últimos 100 años y un fuerte recorte en la producción, hacían prever para esta fecha un mercado en ebullición. Y los pronósticos se confirmaron.
En los últimos días, el precio interno del trigo superó al valor de la soja (363 dólares contra 350 dólares) y se constituyó en un récord absoluto para el cereal, informó hoy el diario La Voz del Interior.
Con serios problemas de abastecimiento, la molinería es la que hoy ofrece pagar más de 1.700 pesos por tonelada, mientras la poca oferta disponible sigue sin aparecer.
En este escenario, el precio de la bolsa de harina de 50 kilos duplicó su valor en los últimos 10 días y ya, en algunas ciudades de la provincia de Córdoba, ronda los 220 pesos.
Tratándose de un producto sensible para la evolución de la canasta de alimentos básicos (harina, pan, pastas, galletas y demás derivados), en plena vuelta de tuerca del congelamiento de precios, la situación de este mercado ha encendido la luz de alerta en el Gobierno.
Desde los sectores de la producción señalan a la política oficial como principal responsable de la actual estampida de precios y potenciales faltantes, como en el pasado reciente ocurrió con los valores de la carne, dado que la intervención sobre su comercialización desalentó la siembra y la producción del cereal.
Ante la escalada de precios, el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, agrandó la lupa sobre el mercado. Pidió a los exportadores de granos un urgente relevamiento para saber cuánto trigo disponen, después de que meses atrás se decidió recortarle las autorizaciones de embarques al exterior, pese a que el sector ya había pagado retenciones por adelantado.
Luego de comprar 4,8 millones de toneladas y embarcado tres millones, la exportación declaró tener en su poder un stock de sólo 360 mil toneladas.
Los operadores calculan que ya vendió a la molinería cerca de 1,5 millón del saldo que tenía para colocar en el exterior. El viernes pasado, la Cámara de Exportadores informó que el Gobierno les había solicitado volcar al mercado interno 500 mil toneladas.
Datos privados sostienen que el remanente de trigo en manos de productores e intermediarios rondaría los 3,5 millones de toneladas, y que mucho de ese volumen es de baja calidad.
La tensión actual del mercado de trigo es más visible si se compara que los valores futuros del cereal, para cuando esté disponible la nueva cosecha a partir de diciembre, se posicionan en los 193 dólares, con una brecha importante respecto de los valores actuales, pero aún atractivos en relación con los precios normales del año pasado.