La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) luego de su reunión de Consejo Directivo, que sesionó en Coronel Pringles, Buenos Aires, el pasado 28 de septiembre declaró:
– Que la transferencia de recursos del sector productivo al sector frigorífico exportador y al consumero calculada en U$S 300 millones a la exportación y 100 millones de pesos al consumero no ha tenido explicación oficial alguna.
– Que la feroz sequía que azota la región sudoeste y oeste de la provincia de Buenos Aires, como así también gran parte de la provincia de La Pampa merece la atención preferencial por parte de la nación ya que mas allá de las perdidas económicas manifiesta un grave problema social.
– Que el manejo arbitrario de los mercados cerealeros está llevando a nuestro país a la reducción de su producción luego de los records logrados en la campaña 2004/ 2005.
– Que la imprevisión en el abastecimiento de gasoil evidencia graves dificultades en la planificación de los establecimientos productivos y la consecuente disminución de producción, dejando trascender la falta de gestión en el Ministerio que graciosamente es llamado de Planificación Federal, Inversión y Servicios Públicos.
– Que la permanencia de las retenciones a los lácteos y los continuos desmanejos en el precio de la leche dejan a este sector en la incertidumbre, la imprevisibilidad y la imposibilidad de planificar seriamente la producción de un alimento tan importante para la población.
– Que la modificación del régimen de importación temporaria en favor de la industria aceitera promovería una competencia desleal para los productores argentinos, ya que es sabido que la industria no elabora la totalidad de la producción de soja que se produce en nuestro país y que un importante volumen de la misma se exporta directamente como poroto.
– Que la situación que atraviesa el sector agropecuario por lo antes expuesto y el notorio desinterés del gobierno nacional de establecer canales de dialogo, con el impacto social y el riesgo al desarrollo de las comunidades del interior que genera la crisis agropecuaria merecen una necesaria y urgente solución a estos temas que impiden el normal desenvolvimiento productivo y atentan contra el bienestar general de la población.
– y considerando que los funcionarios de turno son mandantes de todos los habitantes de esta nación, y no sus propietarios, es que llamamos una vez más a la reflexión y al diálogo, ya que la rentabilidad en el sector agropecuario y la subsistencia del campo está en peligro.
Por todo lo antedicho la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa ratifica el estado de alerta y movilización, y solicitará a Confederaciones Rurales Argentinas la más enérgica de las actitudes en busca de necesarias e impostergables soluciones.