El fortalecimiento de los actuales puntos de control de cíticos y la aplicación de nuevas medidas de fiscalización fitosanitaria y de calidad en las plantas empacadoras del producto fue acordado en la última reunión del Comité de Empaque, integrado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC) y representantes del sector privado, que tuvo lugar el pasado 12 de marzo.
La medida obedece a que durante el transcurso de la campaña 2013 diferentes países de la Unión Europea interceptaron catorce envíos de limones con presencia de mancha negra (uno en Italia, uno en España y los restantes en Holanda) y se cumplirá en el marco del Programa de certificación de fruta fresca cítrica para exportación a la Unión Europea y mercados con similares restricciones cuarentenarias que ejecuta el Senasa.
El control fitosanitario de la mancha negra es fundamental a los fines de lograr una producción citrícola que cumpla las exigencias fitosanitarias de los países de la Unión Europea y otros mercados con similares restricciones cuarentenarias.
Cabe destacar que Tucumán aporta el 84% de los limones del país, cultivados en una superficie de 34.000 hectáreas. La Unión Europea recibe el 76% de las exportaciones de limones tucumanos, seguida por Europa del Este, que compra el 19%.
La responsabilidad de garantizar un limón de calidad y de sanidad que satisfaga las exigencias fitosanitarias recae en cuatro pilares: el productor, el empacador, el exportador y los organismos provinciales y nacionales que tienen a su cargo los controles.

