“Creo que es positivo que haya entendimiento para mantener estabilidad en los precios durante las fiestas, dicimbre es un mes muy especial, que se consume de un 30 a un 35% más de la carne que se consume en noviembre. Seguramente en enero, cuando se estabiliza un poco más la demanda y el consumo interno, seguirá esta misma estabilidad de precios. Pero es muy difícil bajar los precios ante esta demanda externa, esta asombrosa aparición de aftosa en Brasil, más el consumo interno de más de 70 kilos por habitante por año como tenemos y en franco aumento. Por lo pronto, lo que se puede hacer es intentar estabilizar y que no suba”, dijo Miguel Saredi, presidente del grupo Pampa Sur, en una entrevista con Infocampo TV.
“En realidad es difícil hacer acuerdos de precios con sectores de productos exportables, porque en el mundo tienen un precio y en la Argentina tienen otro. Nosotros lo que planteamos es: déjennos exportar la mayor parte posible y subsidiemos el consumo interno. Es la única posibilidad que tenemos, así lo ha hecho Austrialia, Nueva Zelanda y Canadá, los grandes países productores de alimentos. Soñamos con que nos saquen las retenciones, así podremos exportar más y subvencionar y subsidiar el consumo interno. Con lo que ganamos exportando podemos realmente hacer que la gente en la Argentina consuma más barato”, enfatizó Saredi.
No obstante, el titular de Pampa Sur reconoció que a partir del pago de la deuda al FMI, se reducen las posibilidades de que el gobierno elimine las retenciones. “Sabemos que necesitan la caja del campo para pagar otras deudas y los gastos del Estado. Es una lucha y también un sueño. Sabemos que es difícil que el gobierno las elimine totalmente y abruptamente en 2006. Queremos que las saquen gradualmente para algunos cultivos y para algún tipo de carnes, sobre todo para aquellos productos alejados de los puertos, para carnes no tradicionales y el maíz”, finalizó Saredi.
