Comer o no comer, ésa es la cuestión. Con una frase tan sencilla se crea la paradoja. La carne sigue aumentando. En sólo una semana los animales rematados en el Mercado de Hacienda de Liniers subieron un 20%. “El lunes pasado ya remarcamos los precios y según como está desarrollándose todo, la semana que viene va haber otro aumento para los consumidores”, contó a Infocampo Daniel Otero, empresario del sector.
Los números no mienten, un kg de milanesa que la semana pasada costaba $7,40, el lunes próximo puede llegar -como mínimo- a $9,90.
Parece que de nada sirvió el acuerdo que realizó el secretario de Agricultura, Miguel Campos, con los frigoríficos para mantener los precios a los consumidores. La cuestión es muy simple, el mercado se rige bajo la oferta y la demanda y en los remates del Mercado de Liniers, la base comenzó muy por arriba de lo habitual.
Los carniceros están en el medio de una encrucijada. “La cuestión es muy simple, algunos prefieren aumentar el precio a los consumidores enseguida y otros absorbemos una parte, pero con estos valores es casi imposible, si no nos vamos todos a la quiebra”, explicó Otero, muy preocupado.
Mientras muchos se preguntan por qué nadie cumple el acuerdo firmado con el gobierno, desde el sector de los carniceros tienen la respuesta: “Los frigoríficos que firmaron el acuerdo son los exportadores y se comprometieron a mantener los valores de la carne que vuelcan al mercado interno, pero lo que están haciendo ahora es no vender nada a los pequeños comerciantes, ya que tampoco ellos (los exportadores) quieren tener pérdidas”.
En este mismo contexto, el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Carne Argentina (Sicgba) convocó a un paro para el 14 y 15 de noviembre próximos, “en defensa de las amas de casa y todos los trabajadores, ya que el acuerdo de los frigoríficos no se está cumpliendo y tampoco hubo aumento en los salarios de los trabajadores empleados en el sector en los últimos dos años”.
