Con el crecimiento de la producción vinícola surgen o se consolidan negocios vinculados con ella. Un ejemplo es el aceite de uva, un subproducto que se exporta entre un 70 y un 80% a Chile, Estados Unidos, España, Italia, Japón, Taiwán y México, y que en los supermercados nacionales su precio triplica al del de girasol y aventaja casi en un 40% al de oliva.
En nuestro país la producción se estima en apenas unas 3.500 toneladas anuales y según datos de la Dirección Nacional de Mercados de la Sagpya, en 2005 se exportaron 2.504 toneladas (entre ventas a granel y refinado en envases de 5 litros) por un valor total de u$s2,96 millones. El valor promedio de la tonelada fue de u$s1.182 FOB. Pero lo más jugoso es que en 1999 valía 835 u$s/t, esto significa que en 7 años se revalorizó en más de un 40%.
El aceite de uva se obtiene a partir del orujo, un remanente sólido del prensado de la uva para vinificar, donde se encuentra la semilla. Actualmente, pocas empresas son protagonistas de esta producción.
Una de ellas es Olivi Hermanos, que inició sus actividades en 1966 en Palmira, departamento de San Martín, en Mendoza, de la mano de Vinicio, Vicente y Arnaldo Olivi, tres hermanos de origen italiano, que construyeron sus propias maquinarias y equipos de extracción.
Hoy, la empresa produce aproximadamente 500 toneladas anuales, que vende envasadas y a granel. Trabaja casi todo el año y procesa 80 toneladas de semilla en 24 horas. La materia prima la compra a las bodegas de la provincia.
âEs difícil aumentar el volumen de aceite porque la producción de uva se mantuvo constante en los últimos años y esto es sólo un producto secundario. Si no aumenta el número de viñedos, no se puede incrementar la producciónâ, sostuvo Adriano Cesaroni, representante de la firma, y agregó que el valor FOB de exportación en aceite refinado es de 1.900 u$s/t y de $4.100 en el mercado local.
El proceso comienza con la separación de la semilla del orujo, luego se la seca y se muele para extraer el aceite, que luego es refinado. Se requieren 15 toneladas del simiente para obtener una de aceite.
Otra empresa que tiene presencia en este negocio es Molinos Río de la Plata SA, con una producción de alrededor de100 toneladas al año, que vende casi en su totalidad al mercado interno bajo la marca Cocinero y sólo en 2006 exportó una pequeña cantidad a Chile.
âLa perspectiva a mediano plazo es seguir comercializando este aceite, ya que es una variedad dentro de la línea Cocinero que genera expertise y diversidad de propuestas al consumidorâ, indicaron fuentes de Molinos.
Cesaroni señala que las proyecciones para el consumo âdeberían ser positivas, sobre todo debido al aumento del uso de otros aceites vegetales para la producción de biodiésel y además a la apreciación de este producto en particular, especialmente en países de Asiaâ.
En cuanto a su valor nutricional, el aceite de uva ofrece beneficios que van alineados con la tendencia actual de seguir una dieta sana. Tiene una alta concentración de vitamina F (70%), llamada también Omega 6 , un ácido graso esencial que el organismo humano no puede sintetizarlo y que es necesario introducirlo por fuentes externas; también contiene vitaminas E y D, no contiene colesterol y se recomienda para la conservación de la salud cardiovascular.
Así, un desecho de la producción puede aprovecharse y ser transformado por la industria en un alimento con valor agregado bien cotizado por los consumidores.
