Especialistas en transporte coincidieron hoy en resaltar que “hay un déficit enorme” en la infraestructura vial y ferroviaria, y consideraron que desde el Estado deben impulsarse “inversiones para mejorar el volumen de carga”, especialmente de productos agroindustriales para el mercado interno y la exportación.
El ex presidente de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte José Bernasconi evaluó que “hay un problema grave en el marco institucional” porque “entramos en una etapa de pensar en inversiones. Estamos muy atrasados en materia de infraestructura”.
“El estado de las vías es bastante malo. El ferrocarril debe ser replanteado y contar con instalaciones adecuadas. Hay alguna capacidad todavía ociosa, en algunos casos, y en otras concesiones hay posibilidad de mejorar el volumen. Pero hay que hacer algo para cambiar la historia”, sostuvo al participar de la Séptima Jornada del Foro de la Cadena Agroindustrial realizado en Centro de Convenciones de la UCA.
En tanto, el director ejecutivo de la Fundación Metas Siglo XXI, Osvaldo Ottaviano, consideró que “la construcción de la red de autopistas, conjuntamente con la rehabilitación de los ferrocarriles, descentraliza e integra el territorio a través de una gradual relocalización de actividades productivas y de población, en regiones de gran potencial marginadas”.
“Como consecuencia del desvío de los fondos provenientes del impuesto a los combustibles que fue creado para la construcción de carreteras y que luego pasó a rentas generales, las carreteras quedan siempre para el año que viene y los fondos se derivan a necesidades más urgentes”, agregó.
Ottviano manifestó que “en la región hay un déficit enorme. El problema principal es que el modelo de gestión y la ingeniería financiera imposibilitan un verdadero desarrollo”.
A su turno, el coordinador técnico de la Comisión de Transporte de la Bolsa de Comercio de Rosario, Alfredo Sesé, precisó que “uno de los temas que viene haciéndose público desde hace tiempo es el favorecer a la marina mercante.
El problema surge cuando este tipo de iniciativas viene acompañadas de dos ideas: en algunos casos, de hecho se han intentado varios proyectos de ley, por suerte frenados por el accionar de distintas instituciones, de fondos para financiar la industria naval a través de impuestos a las exportaciones e importaciones”.
“Son iniciativas que están frenadas pero no están muertas, pero hay que estar muy atento. El argumento de la seguridad es utilizado para garantizar un mercado cautivo. Hay un fuerte impulso de bajo el argumento de promover la industria naval y la marina mercante”, continuó.
