La exportadora de granos Bunge afirmó que podría exportar mayores volúmenes de maíz a los Estados Unidos este año si empeoran los daños en los cultivos del país norteamericano.
Según informó la agencia de noticias Reuters, el vicepresidente de agronegocios y logística, de la firma Murilo Braz Sant’Anna, dijo sin embargo que no espera que la abundancia en la cosecha brasileña y la estrechez en la recolección de Estados Unidos lleve a un reordenamiento permanente del intercambio global de granos, como sugirieron algunos analistas.
“No vemos a esto como una estrategia a futuro: lo que Brasil exportó a Estados Unidos fue mucho más simbólico” que un cambio importante en los flujos globales de exportación de maíz, dijo Sant’Anna.
Brasil acaba de terminar la recolección de una cosecha récord este año de 72,78 millones de toneladas de maíz, un ingrediente clave para forraje animal, tortillas y aceite de cocina.
Sant’Anna dijo que los envíos de Bunge a Estados Unidos, el principal productor y exportador de maíz, fueron entregados a compradores en la región del Golfo de México. El ejecutivo no dio más detalles sobre las ventas.
Los futuros del maíz en la Bolsa de Chicago subieron un 45 por ciento desde junio, cuando se hizo cada vez más evidente que el clima seco y caluroso en la zona productora de granos de Estados Unidos tendría impacto sobre el rendimiento de los cultivos.
Desde ese momento, la sequía estadounidense ha sido implacable, convirtiéndose en la peor en más de medio siglo.
El Consejo Internacional de Cereales (IGC, por su sigla en inglés) pronosticó la cosecha estadounidense de maíz en 300 millones de toneladas, muy por debajo de una proyección anterior de 350 millones y peor incluso que las 314 millones del año pasado.
Las existencias mundiales del grano al final de la temporada caería a un mínimo en seis años de 115 millones de toneladas.
