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Cargill: Llena uno de cada cinco barcos cerealeros

Se puede afirmar que uno de cada cinco barcos que salen del país con granos o subproductos de oleaginosas pertenecen a Cargill. En los últimos años, el brazo argentino de la multinacional de origen estadounidense, se posicionó al tope del ránking de los exportadores.

Se puede afirmar que uno de cada cinco barcos que salen del país con granos o subproductos de oleaginosas pertenecen a Cargill. En los últimos años, el brazo argentino de la multinacional de origen estadounidense, se posicionó al tope del ránking de los exportadores.
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Por Infocampo

Las últimas estadísticas de la Secretaría de Agricultura de la Nación, correspondientes a los primeros once meses de 2006, indican que Cargill exportó el 22% de los granos, el 20% de los aceites y el 18% de las harinas proteicas que salen de la molienda oleaginosa, dejando atrás a Bunge, Dreyfus, AGD y Vicentín, sus principales competidores.

En total fueron 11,38 millones de toneladas (Mt) sobre un total acumulado de 57,52 Mt, las que exportó este gigante de los agronegocios en ese lapso.

En el mercado se lo reconoce a Cargill como uno de los jugadores más agresivos en materia de originación de las materias primas. La compañía cuenta con 45 acopios, cinco puertos cerealeros, cuatro plantas de molienda de oleaginosas, siete molinos de trigo y dos malterías. Empresas como Finexcor (frigorífico), Mosaic (fertilizantes), Renessen (un joint venture con Monsanto para comercializar maíces especiales), son parte de los negocios del grupo de compañías de Cargill.

En lo que hace a Cargill SACEI, la empresa que en la Argentina opera el trading de commodities agrícolas, su facturación viene en ascenso, de la mano del aumento de la producción agrícola argentina y llegó a $8.141 millones (incluyendo retenciones por $1.169 M), en el ejercicio cerrado al 31 de mayo de 2006.

La compañía actúa tanto en el comercio del grano como en el de los subproductos del procesamiento, con lo cual en alguna situación se vuelve competidora de sí misma, opinan en el mercado.

La red de originación es de las más amplias que hay en el país, centrada en la pampa húmeda, y representa una competencia muy fuerte para los acopiadores y cooperativas. Si se estima una capacidad promedio de 25.000 toneladas, esta red otorgaría 1,2 Mt de volumen logístico, a lo que hay que agregar la capacidad en sus plantas de procesamiento y sus puertos.

En lo que hace a estos últimos hoy Cargill posee:

a) El puerto Quebracho, al norte de Rosario, con muelle para barcazas y celdas de fertilizantes que opera Mosaic.

b) El puerto de Punta Alvear, al sur de Rosario, que perteneciera a Productos Sudamericanos.

c) El nuevo puerto de Villa Gobernador Gálvez, también al sur de Rosario.

d) El puerto de Bahía Blanca.

e) El puerto de Diamante (Entre Ríos), manejado por una sociedad controlada (Puerto Diamante SA).

Los operadores concuerdan en que tener puertos al sur y norte de Rosario es una ventaja competitiva a la hora de hacerse del cereal, porque pueden ofrecer una pequeña ventaja en el flete respecto de competidores que tienen un solo puerto. De hecho, tanto Bunge como Noble y Dreyfus están abriendo segundos puertos en una estrategia que parece ser similar.

Con el crecimiento de la capacidad de molienda de la industria aceitera radicada en la Argentina, no tener capacidad ociosa es la clave de la competitividad.

En 2006 Cargill importó 450.000 toneladas de soja, en su enorme mayoría desde Paraguay, relegando a Dreyfus como segundo importador con unas 250.000 toneladas.

Pero se estima que este año esos volúmenes podrían incrementarse sustancialmente, y que en su conjunto las aceiteras ingresarían no menos de 2,5 Mt y hasta 4 Mt, gracias a las modificaciones que la AFIP introdujo al régimen de importación temporaria.

En lo que respecta a molienda, Cargill es una de las que más ha crecido en el país, con sus plantas en los puertos de Quebracho (soja) y Gobernador Gálvez (soja), a las que suma sus instalaciones en Quequén (girasol y soja) y Bahía Blanca (girasol y soja). Además opera la planta que Buyatti posee al norte de Rosario.

Las últimas inversiones de la compañía fueron la planta y puerto de Gdor. Gálvez y la planta de malta en Punta Alvear. Para ello, Cargill accedió a los beneficios de la Ley 25.924 que le permite la amortización acelerada a los efectos del cálculo de ganancias y la devolución anticipada del IVA.

En el negocio de la cebada, la compañía sumó a su planta de 90.000 t/año de malta de Bahía Blanca, una segunta planta en Punta Alvear, con capacidad para 140.000 t, con la idea de abastecer el mercado interno y exportar el saldo a Brasil, mercado que importa malta desde Europa.

Por el lado de los números de la compañía en la Argentina, en el ejercicio cerrado al 31 de mayo de 2006 obtuvo una ganancia después de impuestos de $137 millones, contra $180 M el ejercicio precedente, a pesar de haber facturado más.

Un dato interesante es que las sociedades controladas, y en particular la sucursal Uruguay, son las principales contribuyentes al resultado positivo de la compañía. De hecho, en el ejercicio 2006 la sucursal Uruguay aportó $302,5 millones de resultado positivo.

Al mismo tiempo, la sucursal oriental parece ser el principal cliente de la trader. En el ejercicio citado, Cargill SACEI le realizó ventas por $6.303 millones, es decir el 77% de la facturación total.

Otro negocio importante es el que Cargill tiene en la harina de trigo. En 1999, en el desguace de Bunge & Born compró a medias la operación harinera con Molinos Río de la Plata. La nueva compañía se llamó Trigalia y estaba constituida por siete molinos en la Argentina y dos en Brasil.

La novel empresa tomó una política muy agresiva en el mercado, que descolocó a empresas tradicionales del sector. Pero con la devaluación de 2001, la empresa habría decidido sacar el pie del acelerador. Igualmente, en 2002 Cargill compró la participación de su socia Molinos y pasó a detentar el 100% de Trigalia, a la cual además le cambió el nombre por Harinas Mercosur.

Junto con Molinos Cañuelas, del grupo Navilli, Cargill es el principal exportador de harina de la Argentina.

Finalmente, la compañía encabeza el ránking de tomadores de crédito en la plaza financiera local, en el rubro de las traders.

Según el Banco Central, a diciembre mantenía un stock  de créditos por $1.169,5 millones, de los cuales el 38% estaba en manos del Banco Nación y el Banco Francés, en partes casi iguales.

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