El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, y representantes de la Federación del Citrus de esa provincia (Fecier) analizaron la posibilidad de expandir la exportación citrícola hacia mercados externos limítrofes y el de Estados Unidos y la fijación de aranceles para la exportación de citrus a Rusia.
Tras el encuentro, que se realizó anoche, el presidente de la Fecier, Fernando Borgo, dijo que dialogaron con el mandatario provincial “sobre el impacto social que tiene la citricultura en nuestra zona en cuanto a la incorporación de mano de obra directa e indirecta”.
También conversaron sobre las “gestiones en la apertura de mercados externos, tanto limítrofes como el de Estados Unidos, que es algo que le estamos apuntando hace un par de años y parece que está muy cerca de concretarse, pero aún faltan algunas cuestiones”.
En el encuentro se discutió asimismo “la fijación de aranceles en cuanto al mercado de exportación de Rusia”; y se analizó la forma de asistir a los citricultores financieramente porque “hoy es un sector que esta desfinanciado y hace un par de años que venimos trabajando por debajo del costo de producción”.
Borgo resaltó que el sector “no escapa a la actualidad de muchas de las economías regionales” y reconoció que “la situación es bastante compleja, con un mercado interno un poco retraído que hace que los precios estén por debajo de lo que es el costo de producción”.
El empresario reveló que también hablaron con el gobernador “sobre la divergencia del precio que paga el consumidor por un kilo de citrus y lo que recibe el productor en su chacra” y adelantó que el organismo que preside “está realizando estudios para tener números oficiales en la mano y tratar de ver en las cadenas de valor donde se está escapando lo que podría ser ganancia para el productor”.