“Venimos de pasar una etapa crítica, muy severa con bajos precios debido a los subsidios brutales que recibe el algodón en el mundo, particularmente en los Estados Unidos es el cultivo extensivo que más subsidios recibe en el orden de los u$s 3.500 a los 4. 000 millones a la parte productiva primaria. El año pasado la Organización Mundial del Comercio le falló en contra ante una interdicción de Brasil, Australia y Argentina con respecto al aldogón. Hace unos 15 días el Congreso de los Estados Unidos acató la orden de la OMC y le dio baja al segundo tramo de los subsidios de los Estados Unidos que ronda los u$s 1.000 y 1.2000 millones”, explicó Ernesto Bolton, presidente de la Cámara Algodonera Argentina, durante una entrevista con Infocampo TV.
La medida comenzará a regir a partir del 1° de agosto, en la próxima cosecha del hemisferio norte. “Esta decisión ya tuvo su efecto en los precios. En estos momentos tenemos una moderada rentabilidad y esto es muy alentador, tenemos uno de los costos de producción más bajos del mundo y esto nos pone contentos, después de seis o siete años, volvemos a tener cierta rentabilidad”, enfatizó Bolton.
El algodón tuvo un récord en la superficie implantada en 1996/97 de 1.300.000 ha, que luego decayó a 200.000 ha en 2002. Al respecto, Bolton consideró que la intención de siembra se podrá recuperar y “que se hará rápidamente”.
“El decaimiento de los precios fue acompañado por la depresión en la producción en la Argentina. Nosotros pagamos retenciones y los norteamericanos cobran subsidios astronómicos. El algodón no tiene productores cautivos en nuestro país, sacando los minifundios que se dedican a esta producción porque no tienen alternativa”, sostuvo, al tiempo que agregó que se podría llegar las 1.700.000 ha cultivadas con productores que hagan rotación entre soja y algodón.
“Con el último lustro de precios altísimos de la soja, los productores abandonaron el algodón. Pero hoy vuelve a ser una alternativa. El año pasado se sembraron 400.000 ha, este año se repitió, aún con un período de seca brutal en el momento de la siembra. Nosotros no estamos en la disyuntiva soja o algodón, porque son absolutamente compatibles como cultivos rotativos”, recalcó Bolton.
El presidente de la Cámara dijo también que “hay muchos minifundistas conversando con los gobiernos de las provincias para recibir apoyo, porque para productores con sólo 3 hectáreas el algodón es la única posibilidad viable, creo que hay que ayudarlos, pero no podemos basar la producción aldonera argentina en el minifundio. Debe ser un complemento de los productores generales”, señaló.
En cuanto a las perspectivas pre cosecha, destacó que “el único incentivo que necesita el productor es la rentabilidad, que hasta ahora no la tenía, pero puede volver a ser una producción interesante como lo fue en la década del noventa cuando éramos el cuarto exportador mundial”.
