En el mercado local ya se están ofreciendo bonificaciones de hasta 7 u$s/t para trigos con un mínimo de 28% de gluten. Esto no es casual. Sucede que este atributo industrial del cereal escaseará durante la presente campaña agrícola. “Este año no regalen el trigo, háganlo valer”, aconsejó Pablo Panza, responsable del programa Trigo Calidad Syngenta, en comunicación telefónica desde Curitiba (capital del estado brasileño de Paraná).
“Va a haber muy poco trigo de buena calidad. Las primas tendrían que ser mucho más altas que las actuales; deberían estar en el orden de los 20 u$s/t”, indicó Panza. El programa liderado por este técnico se encarga de realizar envíos de cereal segregado a Brasil (se trata de un servicio que ofrece Syngenta a aquellos productores que son clientes de la firma de agroinsumos).
En estos días, Panza está negociando con molinos brasileños del sur de Brasil la colocación de partidas de trigo con un mínimo de 30% de gluten y 12% de proteína. La base de negociación de las primas está en 12 u$s/t, pero la idea es lograr 15 u$s/t. Esto no es un capricho: la cosecha de trigo brasileño 2005/06 fue escasa y en su mayor parte de pésima calidad.
En la Argentina existen dos macrorregiones trigueras en las cuales suelen abastecerse la industria y los exportadores para obtener materiales de buena calidad panadera. Una es el sudeste de Buenos Aires. La otra, el sudeste de Córdoba.
El problema es que los trigos de la región sudeste, en general, tendrán parámetros de calidad comerciales e industriales menores a los esperados debido a las importantes lluvias registradas en las últimas dos semanas (este fenómeno será más notable en los partidos bonaerenses de Tandil y Azul). Además, en esa región triguera los excesos hídricos provocaron un restraso generalizado de la cosecha del cereal y, en algunos casos, situaciones de brotado.
“Hasta ahora no se observa un problema general de brotado, pero puede llegar a haberlo en caso de que las lluvias persistan (en la región sudeste)”, comenta Miguel Corti, uno de los directores de la firma Alea, con sede en Necochea y especializada en comercialización de trigos segregados.
En cambio, la calidad general presente en la región sudeste de Córdoba es buena. Según un relevamiento realizado por el Laboratorio de Calidad Industrial de Cereales y Oleaginosas del INTA Marcos Juárez, en el presente ciclo agrícola el nivel promedio de gluten en esta zona es del 26,1%, mientras que la fuerza panadera (W) se ubica en 237 y la estabilidad farinográfica en 22,7 minutos.
Si esta fuese una campaña triguera normal, la oferta de partidas de buena calidad no sería crítica. Pero el dato es que la producción argentina de trigo 2005/06 sería de apenas 11,6 M/t, según previsiones de la Bolsa de Cereles de Buenos Aires; se trata de la cifra más baja de los últimos diez años.
Además, al 13 de enero pasado los compromisos externos de trigo argentino 2005/06 alcanzan 4 M/t de un saldo exportable total estimado en 6,5 M/t.
A la misma fecha del año pasado, dichos compromisos del trigo 2004/05 eran de 4,2 M/t, pero de un saldo exportable de 10,9 M/t.
En otras palabras: la oferta de trigo, en general, es poco abundante. Y la disponibilidad de trigos de buena calidad es bajísima. Por ende, antes de entregar el cereal, es recomendable identificar aquellas eventuales partidas que puedan presentar parámetros óptimos de calidad comercial e industrial para intentar obtener una bonificación por las mismas.
Ezequiel Tambornini
Especial para Infocampo
