En un año signado por los sofocones, producto de la contaminación de la miel con nitrofuranos, la apicultura intenta levantar cabeza. Dos hechos se destacan: la reunión de intendentes, técnicos de la Facultad Regional de Resistencia y productores apícolas de la región chaqueña para determinar las necesidades y las demandas del sector y un fideicomiso para la producción de Córdoba.
A partir del acuerdo entre los jefes comunales y el decano de la UTN Facultad Regional Resistencia, Sebastián Vicente Martín, se puso en marcha el desarrollo chaqueño, conjugando las capacidades y potencialidades de los productores locales con el aprovechamiento de los recursos formados en la región.
Para concretar el desarrollo de la cuenca mielera, se articularán acciones con otro proyecto que la UTN espera poner en marcha a través de los proyectos federales de Innovación Productiva y el Centro de Calidad de Mieles, que permitirá optimizar los análisis de laboratorio a bajo costo para los productores apícolas de la región, apuntando a certificaciones necesarias para la inserción de los productos en mercados competitivos.
Durante el encuentro se destacó, como uno de los objetivos primordiales, la posibilidad de “suplir el asistencialismo clientelista”, que “maniató” las capacidades de la clase obrera argentina y frustró las posibilidades de desarrollo regional volviendo ociosa la capacidad productiva de determinados sectores”.
Fideicomiso mielero
Para afrontar los desafíos que propone el ingreso en los grandes mercados de consumo, los apicultores cordobeses debieron ajustar sus envíos a los estándares más exigentes.
En este sentido, en el Ministerio de Agricultura se presentó ayer el primer fideicomiso que Garantizar SGR formalizó con la Subsecretaría de Política Agropecuaria y Alimentos.
Es el primer fideicomiso en concretarse con la capitalización de un único inversor privado -BAPRO Mandatos y Negocios-, junto a Nación Bursátil SA en su condición de organizador de la colocación de títulos de deuda por u$s384 mil, emitidos a 300 días.
El subsecretario de Política Agropecuaria, Claudio Sabsay, elogió el proyecto. “El Garanpyme es un instrumento financiero cuya repercusión social es esencial”.
Ese monto entregado a los 72 microproductores seleccionados les permitirá cubrir los gastos para obtener 688 mil kg de miel que será exportada por Mieles del Sur SEM y que, con un precio base de 5 $/kg, asegura al inversor la solvencia del plan.
