El ministro de Defensa y precandidato presidencial por el FpV, Agustín Rossi, criticó duramente en diálogo con La Capital la manera en la que se prepara la oposición para las elecciones presidenciales 2015. Al respecto, lanzó: “Nosotros parecemos un liceo de señoritas y la oposición parece un cabaret donde se pelean y acusan mutuamente”. Y explicó que eso se debe a que el kirchnerismo tiene dos diferencias fundamentales que son que “participa de un proyecto colectivo y tienen un único liderazgo que es el de la Presidenta”, a quien ve como conductora de ese espacio político después de diciembre de 2015.
Respecto a su último libro, llamado “Hombre de palabra”, el dirigente contó que está basado en su experiencia parlamentaria durante siete años y medio al frente del bloque.”Allí están condensadas las principales leyes que se debatieron durante ese tiempo como la 125 (retenciones móviles a las exportaciones de granos), la recuperación de YPF, el matrimonio igualitario, la ley de medios, la estatización de Aerolíneas, la nacionalización de las AFJP, la ley de movilidad jubilatoria”, dijo tras confesar que de todas esas leyes, “la más bella fue la del matrimonio igualitario, aunque hubo leyes que sentí que estábamos haciendo cosas trascendentes, como la nacionalización de las AFJP, la recuperación de YPF. Y también la ley de medios, orgulloso del bloque, que nos sobrepusimos a una cantidad de presiones importantes. Después hay sesiones imposibles de olvidar como la que homenajeamos a Néstor Kirchner que es el discurso que nunca hubiera querido pronunciar”.
En relación a los debates de la oposición, Rossi sostuvo que “lo peor de la oposición ha sido el desplante parlamentario de levantarse e irse. Eso debilita, desluce, a ellos por sobre todas las cosas. Eso lo hicieron con la ley de medios, que fue lo peor, es una actitud reprochable y equivocada, y no tiene dimensión del costo político que pagan. Si habría algo que criticarle a la oposición es que frecuentemente quedó atrapada en el clivaje oficialismo-oposición, priorizando ese clivaje al proyecto que se trataba. Ejemplo, la UCR históricamente tenía una posición de que el sistema previsional tenía que ser único, solidario, intergeneracional y en manos del Estado. Votó en contra de la privatización del sistema en los 90 y cuando votábamos para hacer lo que ellos mismos tenían dentro de su plataforma, votaron en contra nuevamente privilegiando su rol de bloque opositor. Y también tuvieron la influencia de los medios de comunicación opositores. La ley de las Paso la votamos solamente nosotros, aunque en ese momento estaban casi todos los partidos de acuerdo”.
Y añadió: “Siempre que se acercan los escenarios electorales, se exacerba esa actitud de la oposición y repiten algunos errores. Creo que haberse levantado para no debatir el Código Civil, que es lo más importante después de la Constitución desde el punto de vista del ordenamiento jurídico de la Argentina. Y es un terreno que debería valorarlo porque la oposición no tiene el Poder Ejecutivo, entonces el Legislativo es un buen lugar donde la oposición puede hacer sentir sus ideas”.
Ante la consulta de si cree que la oposición trasladó su acción a los medios y la Justicia, Rossi explicó: “En estos años de democracia, la sociedad interpeló a todos: políticos, legisladores, gobernadores, intendentes, periodistas, Iglesia, religiones, artistas, todos, pero cada vez que alguien quiere poner en discusión el rol de la Justicia, el propio Poder Judicial se escuda detrás de que “quieren afectar su independencia”. Y la verdad es que la Justicia en estos últimos años ha aumentado su carácter endogámico y corporativo. Pareciese que cuando hay que investigar a algún funcionario del gobierno, hacen cola, pero si tiene que investigar las más de 4 mil cuentas ilegales en el HSBC en Suiza no tenemos un juez que se haga cargo, algo pasa. Y además está la distinta vara. Lo que hace (el juez) Bonadío ni siquiera lo pidió la diputada Stolbizer que solicitó un informe que se resolvía con un oficio si no hubiese sido Hotesur. El juez hizo un allanamiento on line con los dos medios donde ya se había publicado que esas oficinas de Hotesur estaban vacías.”
De cara a las elecciones 2015, el funcionario reiteró que él nunca “compartió la idea de fin de ciclo que expresaba la oposición a principios de este año”.
Y amplió: “Me parecía una cosa voluntarista que me hacía recordar a lo que sucedió en 2009 y 2010 en donde desde diferentes lugares se creía que la elección parlamentaria de 2009 había determinado la elección de presidente de 2011. Y acá pasó lo mismo que la elección parlamentario de 2013 estaba determinando la de 2015. Esto quedó claramente desvirtuado, el oficialismo muestra una fuerte potencialidad electoral, cuando se ven las encuestas, el FpV está en 35 por ciento y todos los partidos opositores por debajo del 20 por ciento entonces estamos más cerca de un escenario de primera vuelta nosotros que la oposición de evitarlo. Independiente de primera o segunda vuelta, la potencialidad electoral del oficialismo está intacta y deberá definir su candidato a presidente en las Paso donde también estoy anotado y tengo expectativa. Lo que está claro es que la Argentina no quiere fin de ciclo, no quiere volver hacia atrás el reloj de la historia a una etapa como fueron los 90. La mayoría de los argentinos quiere seguir manteniendo”.
Finalmente, confesó que no le molesta que el FpV tenga 7 precandidatos presidenciales porque eso “muestra el vigor y la vitalidad de un espacio político”. Y concluyó: “Que seamos tantos candidatos tiene que ver con el liderazgo de la presidenta que es totalizador y globalizante hacia el interior del FpV. Ella no puede volver ser candidata porque lo prohíbe la Constitución entonces es totalmente razonable que hayamos aparecido un cantidad de dirigentes donde cada uno representa parcialidades, y serán las Paso las que determinen quién recoge más consenso y será quien nos represente”.