Según un relevamiento realizado por el Ministerio de Asuntos Hídricos de Santa Fe se conoció que el 28% de las localidades de la provincia carece del servicio de agua potable, y que un 80% no tiene servicio de cloacas.
Las zonas rurales, como siempre, son las más afectadas. Por el momento no hay en vista obras concretas para subsanar esta situación.
Edgardo Pastores, productor lechero de Elisa es uno de los tantos afectados por la situación: “En el pueblo son muy pocos los que tienen cloacas y nosotros además tenemos el problema que las napas están contaminadas con arsénico. La única manera de vivir bien es comprando agua embotellada”. Las enfermedades de origen hídrico más frecuentes en la Argentina son las gastrointestinales agudas, la paratifoidea, la fiebre tifoidea, las parasitosis intestinales, el arsenicismo, la fluorosis y lametahemoglobineamia.
Una piedra más en el camino para los productores que buscan salir adelante a pesar de todos los problemas que llevan sobre sus espaldas y ni siquiera logran calidad de vida en sus hogares. “Nos cansamos de pedir obras a todos los gobiernos pero nunca encontramos una respuesta concreta. La verdad es que ya estamos resignados a esta situación, ojalá que algún día esto cambie. Pagamos nuestros impuestos religiosamente pero nunca nos devuelven nada, es una constante”, explica Enrique D’ambrosio, un productor frutihortícola del departamento de Las Colonias.
Yanina Otero
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