La liberación de las tecnologías de maíces Bt (resistentes a insectos) realizada este año por la Comisión Técnica Nacional de Bioseguridad de Brasil (CTNBio) está promoviendo crecientes inversiones de las compañías biotecnológicas en el sector semillero del vecino país. Así lo indica un artículo publicado hoy en el diario O Estado de S. Paulo.
La compañía estadounidense Monsanto adquirió ayer la firma semilla brasileña Agroeste Sementes, con sede en Xanxeré, Santa Catarina, por un valor que habría sido superior a los 100 M/u$s.
Se trata de la segunda adquisición registrada en el sector semillero de maíz en menos de un mes. En agosto la estadounidense Dow AgroSciences había comprado la división de híbridos de maíz de la empresa Agromen por un valor del orden de 120 M/u$s.
âEstas adquisiciones no están relacionadas con la expansión de la superficie (brasileña) de maíz, sino con las perspectivas que brinda la liberación del maíz transgénico; cuanto mayor material genético puedan tener las compañías (para ofrecer sus eventos biotecnológicos), mejorâ, indicó a O Estado de S. Paulo André Pessóa, director de la consultora brasileña Agroconsult.
En la campaña 2006/07 el área de maíz de primera en Brasil fue de 9,43 M/ha con una producción estimada en 36,3 M/toneladas, según datos oficiales (Conab). En tanto, el área de maíz de segunda fue de 4,5 M/ha con una cosecha estimada en 14,7 M/toneladas.
El primer estado productor de Brasil es Paraná (7,75 M/t en 2006/07), seguido por Minas Gerais (5,18 M/t), Rio Grande do Sul ( 4,54 M/t) y Santa Catarina (3,17 M/t).