Representantes de la Comisión de Enlace Agropecuaria esperaron ser convocados hoy por funcionarios del gobierno nacional para dar una definición sobre las negociaciones que se iniciaron ayer tendientes a normalizar el mercado triguero nacional (intervenido desde 2006).
“En la reunión de ayer nos volvieron a presentar la misma propuesta que ya rechazamos el año pasado, por medio de la cual se busca concentrar el mercado de trigo en cinco grandes empresas exportadoras”, dijo hoy a Infocampo Eduardo Buzzi, presidente de Federación Agraria Argentina (FAA).
“Nosotros hemos presentado una idea superadora que el gobierno prometió estudiarla; pero sabemos que es difícil que la acepten”, agregó Buzzi.
La propuesta que el gobierno nacional presentó al sector agropecuario consiste en concentrar todas las ventas de trigo en cinco grandes firmas exportadoras a un precio determinado por el gobierno y que sería cercano a FAS teórico; luego todos los molinos deberían comprar cereal a los cinco traders a un valor inferior a dicho FAS y la diferencia sería cubierta con subsidios oficiales.
En este marco las empresas que se verían favorecida son: Bunge Argentina, Cargill, ADM Argentina, Toepfer y Dreyfus.
“No vamos a aceptar esta propuesta, dado que perjudica a los pequeños y medianos molineros”, indicó Néstor Roulet, vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).
“Somos conscientes de la necesidad de que el consumidor cuente con precios accesibles, pero dicha propuesta produce un gran daño al productor, que no logrará un precio razonable”, sostuvo el dirigente.
Por su parte, la propuesta del sector agropecuario y sobre la cual el Secretario de Agricultura Javier de Urquiza, prometió dar respuesta hoy consiste en la apertura del registro de exportación sin restricciones (actualmente cerrado de manera indefinida por la Sagpya); permitir una plena competencia entre la exportación y la molinería; para mantener estables los precios minoristas de los productos panificables, aplicar compensaciones oficiales a los molinos en función de las bolsas de harina comercializadas en el mercado interno; derogación de las retenciones móviles para que los mercados de futuros agrícolas en general y del trigo en particular puedan operar normalmente; y asegurar el abastecimiento interno de los molinos a través de la utilización del Mercado a Término (Matba), los cuales deberán programar sus adquisiciones a lo largo del año tomando posiciones compradoras en dicho mercado.

