La justicia federal de Rosario le ordenó al Senasa inspeccionar dos mercados al dar lugar a un amparo ambiental en el que se establece la presencia de biocidas, plaguicidas, fitosanitarios y agroquímicos en mercadería.
La industria semillera busca nuevos genotipos que sean superadores a los actuales, pero según indican investigadores, muchas veces no identifican el motivo.