En lo que va del mes de mayo el trigo disponible en Quequén alcanzó un máximo de 403,3 $/tonelada, mientras que en ese mismo período el mayor precio registrado en Bahía Blanca fue de 380,0 $/t. En las últimas semanas el puerto bahiense comenzó a perder su tradicional preponderancia en la comercialización del cereal.
âActualmente el puerto de Bahía Blanca (Ing. White) está priorizando los embarques de soja y maíz porque dan mayor rentabilidad que el trigoâ, señaló hoy a Infocampo Beatríz Allan, especialista de la Dirección de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca.
âGran parte del trigo que está ingresando en Bahía Blanca es derivado a Quequén”, afirmó Allan, para luego agregar que “el puerto de Bahía Blanca siempre se distinguió por ser líder en exportación de trigo, pero ahora estamos notando que ese liderazgo es superado por el puerto de Quequén”.
En la zona sudeste de la provincia de Buenos Aires el rinde promedio de trigo sobre una superficie cosechada de 1,40 M/ha fue de 34,5 qq/ha en el ciclo 2006/07, mientras que en la región sudoeste fue de apenas 12,5 qq/ha sobre 580.000 hectáreas, según estimaciones de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
âLa oferta de trigo en el puerto de Bahía Blanca está siendo muy pobre producto de las malas condiciones climáticas que vivió la zona (sudoeste) durante la campaña pasada”, indicó Miguel Corti Maderna, gerente de Alea & Cía.
“Además, la intervención del mercado generó desánimo en los productores. Estamos notando que muchos (empresarios agrícolas) no tienen ganas de vender a los actuales precios (de 380 $/tonelada)â, añadió Corti Maderna.
De todas maneras, el fenómeno que se observa en Quequén podría ser sólo coyuntural, dado que en la jornada de hoy martes en Bahía Blanca los exportadores ofrecieron forwards de trigo enero 2008 a 140 u$s/t (el mismo valor que en el UpRiver), mientras que en Necochea el máximo ofrecido para esa posición fue de 137 u$s/t.
A partir de este año, una vez finalizada la obra de la Escollera Sur en el puerto de Quequén, la Prefectura Naval local procedió a flexibilizar las normas operativas vigentes en dicho puerto, al permitir que los buques de hasta 199,5 metros de eslora puedan operar con olas de hasta 2,10 metros cuando su calado no exceda los 30 pies a la entrada y 33 pies a la salida.
Las autoridades del Consorcio del Puerto de Quequén aseguraron que las nuevas medidas operativas permitirían a los productores acceder a mejores precios de los granos a partir de la reducción de los costos portuarios.
Javier Lanari
