El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) decomisó y destruyó 22.050 kilogramos de fruta cítrica que había sido interdictada previamente, cuando se detectó que era trasladada desde Corrientes hacia Tucumán sin Documento de Tránsito Vegetal (DTV) y con rótulos identificatorios que poseían Renspa vencidos desde el 2014.
“La medida se tomó con el objetivo de proteger al país del HLB y de su vector. Proteger la citricultura es defender nuestra economía regional y miles de puestos de trabajo”, explicó el coordinador de Protección Vegetal del Centro Regional NOA Sur del Senasa, Rafael Rodríguez Prados. Y agregó: “El ingreso de esta enfermedad provocaría un impacto social y económico muy alto, por lo que resulta trascendente mantener el actual estatus sanitario del país”.
Por su parte, el coordinador regional de la Asociación Fitosanitaria del NOA (Afinoa), Rodrigo Galíndez, señaló que “en la provincia hay seis puestos de control fitosanitario, que se suman a los de Salta y de Jujuy. La idea es trabajar en forma coordinada en la región para prevenir el ingreso del HLB”.