La división de investigación de semillas de Monsanto Co. en el sudeste de Brasil fue invadida hoy por unas 300 personas. Mujeres de Vía Campesina, un grupo activista, entraron hoy en las instalaciones de la empresa en Santa Cruz das Palmeiras, Sao Paulo, y destruyeron un invernadero y una plantación de prueba de maíz genéticamente modificado, dijo el grupo en un correo electrónico.
La acción fue una protesta por la aprobación en Brasil el mes pasado de la venta y plantación de maíces genéticamente modificado de Monsanto y Bayer AG, dijo Igor Felipe Santos, vocero del Movimiento de los Sin Tierra, grupo relacionado con Mujeres de Vía Campesina. Calificó al incidente como ‘pacífico’.
‘Estuvo dirigido solamente contra la semilla (que contiene el evento) MON810 (resistente a insectos lepidópteros), que obtuvo la aprobación del gobierno’, dijo Santos en una entrevista telefónica. ‘No hay acciones planeadas en contra de Bayer’, añadió, en referencia a la aprobación, también en febrero pasado, del evento T25 (maíz tolerante al herbicida glufosinato de amonio).
Monsanto condenó hoy la acción en un mensaje de correo electrónico. ‘En un régimen democrático como en el que vivimos, los desacuerdos –ideológicos o de otro tipo– deben dirimirse por vías legales y no con ataques a los individuos o la propiedad privada’.
Los miembros de Vía Campesina, un grupo internacional conformado por trabajadores y organizaciones rurales como el Movimiento de los Sin Tierra, han emprendido acciones destructivas contra otras compañías internacionales antes.
‘Las acciones de las activistas continuarán hasta mediados de la semana entrante, en conmemoración del Día de la Mujer’, dijo Santos.
Unas 900 mujeres de Vía Campesina destruyeron cuatro hectáreas de plantaciones de eucaliptos industriales cultivados por Stora Enso Oyj de Finlandia en el estado de Rio Grande do Sul, cerca de la frontera con Uruguay, el 4 de marzo, dijo Santos. Vía Campesina dijo que las instalaciones de Stora Enso eran ilegales por su proximidad con la frontera, dijo el Movimiento de los Sin Tierra en una declaración.
Fuente: Bloomberg

