La Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa acaba de lanzar su sitio web Darse Cuenta. En la presentación su presidente honorario, Víctor Trucco, habló de cuestiones como “cambiar la Argentina sin tomar el poder”, “erradicar el asistencialismo”, y “hacer que los políticos salgan de una acción centrada únicamente en lo que le marcan las encuestas”.
Trucco, fundador de esa asociación y su presidente por 14 años consecutivos, hasta que en 2004 lo sucedió Jorge Romagnoli, en diálogo con Infocampo dijo que no se siente representado por la dirigencia rural tradicional, y que el sistema de la regalía global propuesto en su momento por el secretario Miguel Campos hubiera sido una solución, aunque no fuera la ideal, en el reconocimiento al mejoramiento vegetal. También desarrolló Victor Trucco su idea respecto de que es necesario que las políticas se orienten a fortalecer a los sectores ganadores, algo que desde ya suena “políticamente incorrecto”.
-Hace poco escribía que si se defiende a ultranza a los perdedores, desde el Estado y las instituciones, se renuncia al progreso. ¿Cómo sería exactamente eso aplicado al agro?
-Cuando algún sector que puede no funcionar o ser menos competitivo, entonces se trata de protegerlo. Y capaz que el tipo está haciendo algo que no va, a costa de toda la sociedad. Por ejemplo, en el campo hay gente a la que le ha ido mal. A lo mejor tenía una actividad de baja productividad y encima tomó un crédito que no pudo pagar. Entonces tiene que “darse cuenta” y cambiar hacia otra actividad, empezar de nuevo. A mí me pasó, porque no siempre me fue bien.
-¿Sería el caso del algodón, donde se percibe un empeño en mantenerlo como producción?
-¿Sabés por qué? Porque hay una fundación, que es Pro Tejer, que es de industriales, no de algodoneros. Y en la industria textil, el algodón es una parte; pero no pensemos que para hacer una tela tenés que tener el algodón, si no somos competitivos. Puede que lo sea, pero si no lo es, no esperes a que haya que subsidiarlo, porque le ponés una carga a toda sociedad, para hacer funcionar algo que no va. Creo que diste un buen ejemplo; es algo que no funciona.
-También se ven muchas iniciativas legislativas de apoyo a actividades que naturalmente no han demostrado ser competitivas.
-Eso lo hace todo el mundo con plata ajena, no lo harían con plata propia. Hay negocios políticos, demagogia. No es una cuestión efectiva. Y como se diluye, a veces la gente no tiene conciencia de que eso lo paga ella. Acá tenemos una solidaridad mal entendida, hecha con plata ajena.
-Yendo a la disputa por las regalías del gen RR, llama la atención que habiéndose pronunciado en ocasión del proceso de dumping por el glifosato chino o por la dolarización de las deudas por insumos, en esta ocasión, Aapresid no se haya manifestado institucionalmente.
-No sé, ahora hay un cambio muy grande (por la nueva conducción). Yo no tengo esa responsabilidad, pero lo que sé es que Aapresid trató de acompañar, de decir que había que llegar a un acuerdo, aunque no pusiera tanto énfasis en cuál era la modalidad de ese acuerdo. Hoy sigue habiendo una cantidad de opiniones y no queríamos aportar una más, sino insistir en que se llegue a un acuerdo. Lo que pasa es que se consultó a todo el mundo y el que tenía que tomar una medida, que era el Poder Ejecutivo, no la tomó.
-Pero en su momento, cuando la Secretaría de Agricultura propuso la regalía global, muchos se le fueron encima diciendo que no era lo que querían.
-Si se hubiera tomado la regalía global, hubiera sido una solución; la gente la hubiera aceptado, aunque no fuera el mejor sistema. Después se podía ir cambiando hacia algo mejor. Pero si me preguntan a mí, esto es una barbaridad, (el conflicto por la RR) no puede ser que estemos celebrando los diez años de la soja transgénica con bombos y platillos, porque logramos que la OMC reconozca que la UE no tiene fundamentos para rechazar los transgénicos, y a su vez nos estén demandando por no pagar por ella.
-¿Cree que es justo lo que está haciendo Monsanto (parar los barcos con harina de soja en la UE)?
-No, no. Esa es la estrategia de ellos. Pienso que a lo mejor se manejaron mal o qué sé yo. Pero esa no es mi parte. Yo estoy del lado argentino. Yo digo que lo que está en juego acá es una visión y el acceso al futuro. Nosotros estamos perdiendo la carrera porque la soja RR tiene veinte años pero hay diez en las gateras. Sería renunciar a una agricultura moderna. Por más que emprendimientos como Bioceres o Indear estén trabajando en la materia, creer que la Argentina sea líder y tenga una oferta superior a lo que venga del exterior es una barbaridad. La gente no ve que el costo que hay que pagar es insignificante respecto de lo que está en juego.
-En las discusiones por las regalías del germoplasma y el gen RR, fueron las cuatro entidades gremiales las que se sentaron como representantes de los productores. Como productor, ¿se sintió representado?
-No, no. Si tuvieran que ser sinceros, ellos mismos saben que no es así. Yo tampoco los represento ni los quiero representar. Personalmente lo que quiero es contribuir con ideas que no tienen partido ni entidad gremial. Lo importante es que la gente las haga suyas para que al país le vaya mejor.
-De nuevo: no se sintió representado.
-No, para nada. Tampoco juzgo a los dirigentes como personas, pero no coincido con la visión que tienen de las circunstancias. A veces no hace falta uno que representa sino un liderazgo hacia la sociedad; hace falta gente que crea, que vaya para adelante. Y no hay líderes en el sector.
Javier Preciado Patiño
jpreciado@infocampo.com.ar
