En julio pasado la producción de la industria agroquímica registró una caída del 25,2% con respecto al mismo mes de 2006, según indicó hoy el Estimador Mensual Industrial (EMI) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
En junio de este año la producción de agroquímicos había caído ya un 28,5% con respecto de junio de 2006 y un 34,9% contra mayo de este año.
Los cortes de energía eléctrica y de gas, sumados a conflictos gremiales e inconvenientes para importar ciertos insumos básicos, generaron un derrumbe en la producción nacional de agroquímicos. Este fenómeno impulsó los precios de todos los insumos empleados por el sector agrícola (y en especial por el maíz, que es el cultivo más dependiente de insumos).
No es el único caso. En julio pasado la producción de la industria láctea registró una caída del 12,6% con respecto al mismo mes de 2006, según indicó hoy el EMI del Indec. En los primeros siete meses de 2007, la actividad láctea cayó un 9,0% con relación al mismo período de 2006.
En este caso, el descenso se explica no sólo por las restricciones energéticas, sino también por los derechos de exportación aplicados a los productos lácteos âque hacen inviable los envíos externos de estos productosâ sumados a una oferta de leche bastante inferior a la registrada en el ejercicio anterior.
El 13 de febrero de este año comenzó a regir la resolución 61/07 del Ministerio de Economía, que estableció un precio máximo de 2100 u$s/t para las ventas externas de leche en polvo entera.
En la actualidad, las compañías lácteas argentinas tienen la posibilidad de acceder a un precio de 4000-4100 u$s/t para colocaciones de leche entera en polvo a granel. Esto implica que, con un precio de corte de 2100 u$s/t. tal producto tiene un derecho de exportación real de casi el 50%.

