Luego de llevarse adelante el pasado viernes el primer “apagón de consumo”, agrupaciones kirchneristas ya organizan a través de las redes sociales replicar la iniciativa este 14 de febrero, según publica Infobae.
Con el lema “No se hace un país diferente con gente indiferente”, militantes del oficialismo promueven que este próximo viernes nuevamente no se compre en cadenas de supermercados, estaciones de servicio y tiendas de electrodomésticos.
A través de esta medida, buscan protestar por lo que consideran un irracional aumento en los precios. De acuerdo al discurso kirchnerista, la inflación sería responsabilidad de los empresarios y no de las políticas economícas desarrolladas por el gobierno.
La idea, lanzada en simultáneo con el programa Precios Cuidados, contó con el respaldo del ministro de Economía, Axel Kiciloff, y el jefe de gabinete, Jorge Capitanich, quien defendió el boicot diciendo que “una de las condiciones básicas del ejercicio de la soberanía del consumidor consiste precisamente en no comprar en aquellos comercios o empresas donde el valor del bien se ha incrementado de un modo absolutamente desmesurado”.

