El gobierno de la provincia de Córdoba no aprobó el estudio de impacto ambiental de la multinacional Monsanto, lo que implica un duro revés para la compañía que, desde hace meses, quiere retomar la construcción de una planta de tratamiento de semillas resistida por agrupaciones ambientalistas.
Según publicó el portal Punto a Punto, la Comisión Técnica Interdisciplinaria, dependiente de la Secretaría de Ambiente, recomendó no autorizar el estudio de impacto ambiental de la planta de acondicionamiento de semillas de maíz, en la localidad de Malvinas Argentinas, presentado por Monsanto, informó el Gobierno cordobés a través de un comunicado.
La Comisión identificó que en el desarrollo del proceso productivo no se cumple con los requisitos básicos de gestión integral de residuos, por lo que el estudio de impacto no puede considerarse como instrumento técnico válido que permita su correspondiente aprobación.
Ratificamos que no avanzaremos con la construcción de la planta acondicionadora de semillas de maíz en la localidad de Malvinas Argentinas (Córdoba) hasta que el nuevo estudio de impacto ambiental haya sido debatido en audiencia pública y aprobado por la autoridad provincial correspondiente, aseguró la empresa en un comunicado.La mayor semillera del mundo anunció sus planes de inversión a la presidenta Cristina Fernández a fines de 2012.
En los primeros meses del año pasado dio comienzo a las obras, que fueron intermitentemente suspendidas por medidas cautelares y bloqueos por parte de grupos ambientalistas.
En el plano judicial, la causa tuvo reveses a los largo de 2013. Después de que las obras quedaran suspendidas por tres meses, la Justicia provincial autorizó en abril la construcción, atando la entrada en funcionamiento al estudio de impacto ambiental. Pero los bloqueos y el conflicto permanecieron, y ahora se abre una nueva etapa tras el rechazo del estudio que Monsanto, de todas formas, volverá a presentar.
