La tendencia bajista que mantienen las cotizaciones del crudo en los mercados internacionales impacta rápida y casi simétricamente sobre los precios de las acciones de las grandes refinerías, y afecta a la mayoría de las Bolsas del mundo, según publicó Infobae.
En la Argentina el fenómeno se potencia porque desde hoy la estructura de ponderación de las empresas del sector energético que componen el índice Merval se elevó a más del cincuenta por ciento.
Con la cautela propia de todo comienzo de año, más aún cuando ocurre al cierre de la semana, los negocios resultan muy pobres. Sin embargo, se advierte desde el inicio números en rojo en el canal energético, liderados por pérdidas en torno a 3% en el caso de Petrobras e YPF.
En este caso, la baja fue equivalente a una descapitalización bursátil, esto es del valor de la totalidad de las acciones en la Bolsa, de unos 300 millones de dólares, a 10.340 millones. Sin embargo, rápidas compras de intervención lograron amortiguar la caída hasta 0,4 por ciento, pero no pudo sostenerse y volvió a la zona de 2 a 3 por ciento de merma.
En el resto del panel se mantiene la volatilidad que fue característica de 2014, con bancos que recuperan precio y otros que declinan.
Además, débiles datos sobre el crecimiento del sector industrial de China publicados en la víspera y las recientes cifras desalentadoras sobre la actividad manufacturera de la zona euro alimentan la cautela del mercado bursátil en la apertura de la primera sesión del nuevo año.
